EL MUNDO › LA CIUDAD AUTONOMA, ESCENARIO DE UNA AVALANCHA DE INMIGRANTES
Una tragedia a las puertas de Ceuta
Cinco africanos murieron y más de 100 resultaron heridos tras el asalto al enclave español de Ceuta, en la frontera con Marruecos. España negó responsabilidad por los disparos, pero se informó de balas que usan sus guardias.
Por Elizabeth Nash *
Desde Madrid
España está preparada para enviar tropas a sus enclaves en la costa marroquí, luego de que el último intento de inmigrantes de asaltar el vallado fronterizo dejó cinco africanos muertos y un gran número de heridos. El intento por quebrantar la valla en Ceuta en las primeras horas de ayer fue el tercero esta semana, ya que el antiguo territorio español en la costa mediterránea marroquí es una irresistible atracción para aquellos desesperados en pasar la frontera hacia Europa.
Imágenes televisivas de Ceuta mostraron la filosa valla de alambre de casi cinco metros salpicada con ropas rasgadas y policías recogiendo docenas de escaleras provisorias, enlazadas unas a otras con ramas de árboles. Un refugiado murió cuando se arrastraba sobre una valla metálica con púas y se informó que otro murió aplastado por la muchedumbre. Más de 108 personas recibieron heridas –30 de ellos requirieron hospitalización– entre cerca de 600 refugiados desesperados que habían vagado por meses a lo largo de Africa.
“(El asalto) le costó la vida a cinco personas, dos en suelo español y tres en Marruecos”, dijo la viceprimera ministro, María Teresa Fernández de La Vega. Ordenó una investigación de las muertes y dijo que Madrid anunciaría hoy medidas para lidiar con la reciente explosión de esfuerzos de los inmigrantes de forzar su entrada en los territorios españoles del norte de Africa. “Teníamos fuerzas de seguridad en alerta en el perímetro”, dijo Jerónimo Nieto, el representante de alto rango de Ceuta en Madrid. “Pero un grupo tan grande, tan organizado y coordinado y la brusca manera en que sucedió fue algo nuevo para nosotros.”
El presidente de una organización marroquí que representa a familias de inmigrantes ilegales dijo que refugiados estuvieron bajo fuego cuando se apresuraban hacia el vallado de Ceuta encubiertos por la oscuridad. “Balas fueron disparadas contra los inmigrantes asaltando la valla para forzar su entrada a España”, dijo Jemma Khalil, citando a los activistas de su grupo en el área.
Según informaron fuentes del hospital en la ciudad marroquí de Tetuan, dos de los cuerpos llevados allí tenían heridas de balas de goma –material antidisturbio normalmente utilizado por los guardias fronterizos españoles–. Pero informes españoles insistían en que las balas procedían del lado marroquí. Alrededor de 480 tropas de los duros legionarios de España ubicados en Ceuta y Melilla fueron movilizados ayer para montar guardia en las fronteras, luego de quejas de guardias civiles reclamando que necesitaban refuerzos. El rol de las tropas fue sólo “disuasivo”, según dijeron funcionarios.
El personal del superpoblado campo de acogida pasajero para inmigrantes alojó a otros 100 ayer, alcanzando las 500 personas. “Hicimos todo lo que pudimos por ellos, les ofrecimos comida, abrigo y duchas. No nos interesa cómo llegaron aquí, queremos que se sientan bienvenidos. Mucha gente está dispuesta a dar su vida por cruzar esta frontera. No podemos resolver ese problema, sino sólo ofrecer ayuda y nuestros años de experiencia”, dijo un vocero del centro.
La avalancha de ayer fue precedida por dos noches de similares asaltos sobre las vallas que cierran el paso a Melilla, hacia al este. Vallas idénticas, de 10 kilómetros de largo, rodean el enclave con una franja inhabitada en el medio. Las barreras están coronadas con elementos cortantes y son vigiladas del lado español. Guardias civiles con equipo de disturbios intentaron repeler a casi 1000 migrantes que sitiaron Melilla el martes y el miércoles con escaleras provisorias y resolución organizada. Alrededor de 300 lograron entrar.
España y Marruecos mantienen relaciones amistosas y realizan esfuerzos conjuntos para detener la afluencia de migrantes. Autoridades españolas comenzaron recientemente a levantar la valla a casi seis metros –más alto que el Muro de Berlín–. Pero la desesperación y el número de aquéllos luchando para entrar a Europa crece firmemente. Construir vallas más altas, dijo un trabajador de asistencia local recientemente, “es como poner una compuerta en el mar”.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12. Traducción: Virginia Scardamaglia.