Sábado, 28 de octubre de 2006 | Hoy
EL MUNDO › MAÑANA SE VOTA, CON LULA COMO EL CLARO FAVORITO PARA EL BALLOTTAGE, EN BRASIL
El socialdemócrata Geraldo Alckmin, rival del presidente brasileño, dejó pasar su última oportunidad de acertarle un tiro de gracia a Lula en el último debate antes del ballottage de mañana. Ante las preguntas de los ciudadanos, el socialdemócrata no pudo generar un cruce que pusiera en aprietos al líder del PT.
El presidente brasileño Luis Inácio Lula da Silva salió airoso del último debate con el socialdemócrata Geraldo Alckmin, de cara a las elecciones presidenciales de mañana. El programa, organizado por la red Globo, debía concluir antes de la medianoche, porque era la hora límite fijada por la ley electoral para transmitir propaganda de campaña en los medios brasileños. Lo que quedó claro ayer fue que la remota chance que tenía Alckmin de acertarle un tiro de gracia a Lula se esfumó. Al menos hasta el tercer bloque, al cierre de esta edición, no había habido embestidas que pudieran dejar secuelas irrecuperables, sobre todo por la estructura del debate.
Este fue el cuarto y último debate entre ambos candidatos. El primero fue organizado por la TV Bandeirantes, el segundo en SBT y el tercero en la Red Record. Sin embargo, el de ayer era el más importante, ya que se pronosticaba que la audiencia iba a ser mayor que en los otros tres debates sumados. El debate favoreció a Lula porque tuvo características muy distintas a los anteriores, en las que la animación del espectáculo estuvo a cargo de los dos candidatos, uno contra otro. En el de ayer, los que plantearon los temas fueron ciudadanos comunes, que estaban ubicados en una especie de anfiteatro. Cada uno de los candidatos respondía a las preguntas moviéndose libremente a la tribuna, a diferencia de los otros debates donde estaban parados detrás de un estrado. Esta fue la razón por la que hubo pocos cruces directos entre Lula y Alckmin. El candidato socialdemócrata se mostró más resuelto y elocuente en las respuestas. Lula, en cambio, se mostraba irritable. En algunas respuestas, antes de responder la consulta, se acercó a Alckmin y le habló directamente.
En cada bloque, entre 4 y 5 personas planteaban un tema a partir de una experiencia personal. Los temas que se plantearon en los primeros tres bloques fueron educación, jubilación, salud, saneamiento, desempleo, medio ambiente, seguridad y transporte. Uno de los momentos fuertes de Alckmin fue al hablar del tema deforestación. El candidato socialdemócrata dijo que durante el gobierno de Lula había alcanzado superficies record y afirmó que en el acumulado ya se perdió la superficie del estado de Pernambuco, uno de los más grandes. “Usted no lee los diarios”, le respondió directamente Lula a Alckmin, e indicó que el día anterior había hecho un acto en el que se informó que la deforestación había caído. Lula habló también de la acusación de que había firmado una ley autorizando la privatización de la Amazonia. El presidente indicó que esa ley, que también había sido votada por el PSDB, el partido de Alckmin, era la única herramienta para evitar la ocupación ilegal de tierras.
Lula se sintió más a gusto al hablar del tema seguridad, que fue planteado por un joven estudiante de Recife, quien contó que varios compañeros fueron muertos por el imperio de la violencia. Lula habló del descalabro de la distribución de la riqueza. En cambio Alckmin, un paladín de la tolerancia cero, volvió a responsabilizar al gobierno por la permisividad de las fronteras brasileñas a través de las cuales ingresan armas y drogas.
A Lula le habría sido difícil enfrentarse a este debate, ya que se dice que le recorre un frío por la espalda cada vez que pisa los estudios de la red Globo de Río de Janeiro. La causa: allí perdió un importante debate contra el ex presidente Fernando Collor de Mello en 1989. En esa ocasión hubo una manipulación de las imágenes por parte de Globo, ya que a pesar de que el desempeño de Lula fue desparejo, la televisora hizo una edición insidiosa del candidato del PT, que resultó en una derrota calamitosa.
El presidente festejó ayer sus 61 años en la residencia oficial, el Palacio de la Alvorada, donde alrededor de 400 militantes del PT, simpatizantes y colaboradores le improvisaron una rápida fiesta de cumpleaños. Lula sopló las velitas de una torta de 10 kilos, decorada con las estrellas rojas del partido. Pero a Lula no le interesaba tanto la torta, sino que remarcó que el regalo que desea es su reelección el próximo domingo. “Obviamente estaré eternamente agradecido si el pueblo brasileño me da su voto de confianza nuevamente”, afirmó el jefe de Estado al ser preguntado sobre si quería la reelección como regalo de cumpleaños. “Le pido a Dios salud, porque las demás cosas uno las conquista. Es necesario tener salud. Uno consigue superar barreras que parecen insuperables, pero la salud es condición básica para sobrevivir”, indicó Lula acerca de otros regalos que quiere para su cumpleaños. “A veces pienso si Dios me permitirá llegar hasta allá. Si me lo permite, lo agradeceré el resto de la vida”, afirmó. Entre los asistentes a la fiesta estaban los ministros de Justicia, Marcio Thomaz Bastos; de Defensa, Waldir Pires, y de Relaciones Exteriores, Celso Amorim.
Antes de la primera vuelta, Lula no había aceptado ninguna de las invitaciones a participar de debates contra sus contrincantes. Una de las razones que señalan los analistas como posible causa de que el presidente no haya ganado en primera vuelta es que no asistió al último debate organizado por la cadena Globo, con los otros tres candidatos.
Lula creció mucho desde la primera vuelta. Ahora hacen referencia a él con la expresión “boca de yacaré”, es decir, una boca muy grande, que marca el crecimiento de Lula en estas tres semanas. El 2 de octubre, un día después de la primera vuelta, el mandatario estaba siete puntos arriba de Alckmin. Según las últimas encuestas, llega a la segunda vuelta con 23 puntos de diferencia.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.