Lunes, 15 de enero de 2007 | Hoy
EL MUNDO › CLIMA PESADITO EN WASHINGTON
Por Rupert Cornwell *
Frustración y furia se están viviendo aquí en una forma que no puedo recordar en los 16 años que escribo desde y sobre Estados Unidos. No es como la furia de los sospechosos de siempre –los activistas de izquierda, los blogs liberales y otros que odian a Bush– sino la furia de la frustración e impotencia de los senadores republicanos y demócratas, mientras las guerras pasadas, presentes y futuras agobian a Estados Unidos, sin nada que puedan hacer sobre ello. Allí está la antigua guerra de Vietnam, por supuesto, a la que la debacle de Irak cada vez se parece más. Allí está la actual guerra en el centro del escenario, la que George W. Bush escaló la semana pasada (perdón, no “escaló” sino “aumentó”, como Condoleezza Rice llamó a la decisión de su jefe de enviar 21.500 tropas norteamericanas adicionales, durante su comparecencia ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado). Después están las otras guerras, en Afganistán y Somalia, esta última brevemente bajo los reflectores mientras Estados Unidos perseguía a líderes de Al Qaida con resultados inciertos.
De peor agüero, sin embargo, son las guerras que parecen posibles en un futuro no muy distante, juzgando por el ruidoso discurso de Bush contra Irán y Siria, el ataque del consulado de Teherán en Erbil, en el norte de Irak, y afirmaciones de supuestos planes israelíes de un ataque, incluso atómico, sobre facilidades nucleares iraníes. “Tendremos que hacerlo nosotros mismos –dicen los políticos israelíes– si otro (es decir, Estados Unidos) no lo hace por nosotros.” Y no parece que haya alguien capaz de revertir la marea, aun menos este presidente, que no escucha las opiniones de sus contemporáneos, convencido de que el veredicto distante de la historia es el único por el que vale la pena molestarse.
El resultado fue la extraordinaria explosión de furia por el normalmente moderado Comité de Relaciones Exteriores contra la secretaria de Estado. Bob Gates, el nuevo jefe del Pentágono, tuvo una sesión mucho más tranquila, pero él llegó tarde al lío, y hasta el momento había participado en el Grupo de Estudio de Irak, a cuyo serio informe Bush dedicó débiles elogios antes de echarlo a la basura. Rice, en cambio, ha estado desde hace mucho metida en el lío. Nunca imaginé que escucharía a un senador republicano acusar a una secretaria de Estado republicana de ser parte del “error en política exterior más peligroso desde Vietnam”. Pero lo más frustrante de todo es que, muy en el fondo, los opositores a la guerra y los raros partidarios de la escalada (o “aumento”), como John McCain, saben que cada lado está en lo correcto.
McCain sabe que los demócratas están ciento por ciento en lo correcto cuando dicen que tropas adicionales no son la respuesta a la crisis, cuya solución es política, pero que no está a la vista. Los demócratas también saben que McCain y Bush están en lo correcto cuando dicen que si los norteamericanos se retiran, el resultado sería solamente el caos. La verdadera opción es entre caos ahora y caos después. Esta es la impotencia de saber cuál es el lío, y que sólo hay opciones malas o peores.
Ahora, otra guerra está haciendo una reaparición especial. Aparentemente Bush ha estado leyendo Una salvaje guerra de paz (A Savage War of Peace), el fantástico libro de Alistair Horne sobre la independencia de Argelia de Francia. Unos años atrás se decía que la igualmente fantástica película de Gillo Pontecorvo, La batalla de los argelinos, era obligatoria para los comandantes del Pentágono, mientras estudiaban la insurgencia. Quizás aprendieron algo, y quizá Bush aprenda algo del libro (quizás incluso la lección que aprendió De Gaulle, de que la guerra no podía ser ganada y de que Francia debía irse, cuanto antes mejor). Sin embargo, en el caso de Irak, eso parece más probable para el próximo presidente norteamericano en dos años, y quién sabe qué guerras están en el camino.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Virginia Scardamaglia.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.