El Foro de San Pablo culminó con una condena a Colombia y Estados Unidos. “La situación que vive la hermana República de Colombia constituye el principal factor de riesgo para la estabilidad y la paz en la región”, señala el texto. Desde Montevideo representantes de 70 partidos y movimientos políticos progresistas y de izquierda de 16 naciones del continente rechazaron además el bloqueo económico que sufre Cuba y la globalización.

El conflicto armado en Colombia copó la agenda en la seguidilla de talleres y debates que habían comenzado el viernes, el XIV Foro de San Pablo.

“Un acuerdo humanitario constituye un paso significativo en esa dirección”, apuntó el comunicado. En momentos que Bogotá mantiene relaciones tensas con Quito y Caracas, las organizaciones repudiaron la “guerra preventiva” en una crítica hacia el gobierno colombiano que en marzo pasado bombardeó un campamento de las FARC en suelo ecuatoriano.

Sin abandonar la tradición, Estados Unidos volvió a estar en el centro de las críticas del encuentro. “Con su política antiterrorista busca criminalizar la protesta social y perseguir a los movimientos que luchan por la transformación de nuestros pueblos”, señaló.

Con la presencia de unos 300 delegados y observadores de organizaciones de Europa y Asia, el Foro se comprometió a impulsar la integración mediante el Mercosur, Comunidad Andina, Caricom, Alba-TCP y Unasur. No obstante, alertó sobre sus enemigos. “El avance de los proyectos progresistas es enfrentado por el imperialismo de EE.UU., las derechas nacionales, y los grandes medios”, concluyó.