EL MUNDO › NUEVO INFORME DE LOS INSPECTORES DE ARMAS DE LA ONU
Próxima parada, el Consejo
Por Suzanne Goldenberg y Ewen MacAskill
Desde Bagdad y Londres
Estados Unidos y Gran Bretaña comenzarán la semana que viene una embestida para conseguir la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que autorice la guerra a Irak después de que el jefe de inspectores de armas Hans Blix entregue hoy su informe sobre la frustrante búsqueda de armas de destrucción masiva. Una fuente de la ONU dijo que Blix entregaría una “bolsa mezclada” en la sede central de la ONU en Nueva York, dándole a Irak puntos a favor por libertad de acceso y por atender algunas de las quejas que expuso el mes pasado, pero también enfatizando que subsisten problemas serios.
EE.UU. y Gran Bretaña pondrán juntos todos los puntos negativos y comenzarán a hacer circular un borrador de la segunda resolución la semana que viene. El objetivo es apurar la marcha hacia la guerra, con una resolución que esté lista para fines de febrero. Una fuente del Consejo de Seguridad de la ONU dijo ayer que la resolución podría tener un ultimátum, posiblemente de 48 o 72 horas, para el total acatamiento iraquí. Eso significaría que la guerra comenzaría a principios de marzo. La fuente dijo que la resolución “encendería la mecha”. Blix le dirá al Consejo de Seguridad que le siguen preocupando ciertas áreas vitales:
- Sobrevuelos de los aviones espías U-2. Aunque Irak aceptó durante el fin de semana el pedido de la ONU de permitir los sobrevuelos, estableció en una carta dirigida a Blix exigencias para que se le advierta con anticipación cuándo serán. Blix rechazará esto.
- Entrevistas en privado con científicos iraquíes. Blix aceptará esta concesión pero se quejará de que no hubo suficientes entrevistas y que éstas no fueron lo suficientemente abiertas. Los científicos han estado llevando grabadores a las entrevistas.
- Confirmará el veredicto de los especialistas en balística de que hay un caso prima facie de infracción contra Irak por probar los misiles Samoud-2 más allá del alcance permitido de 150 km. Pero su opinión es que dispararlos unos 33 km extra no es significativo, a pesar de la insistencia, ayer, de Tony Blair y Colin Powell de que sí podría serlo.
- Irak entregó nuevos documentos en relación con las armas prohibidas que dice que ya ha destruido, pero Blix dirá que aún así éstas son mucho menos que las necesarias.
El Consejo de Seguridad está muy dividido y los gobiernos de EE.UU. y Gran Bretaña se enfrentarán a la difícil tarea de asegurarse una mayoría para la segunda resolución y evitar que Francia, Rusia y China ejerzan su poder de veto. Muchas de las palomas en el Consejo de Seguridad sostendrán que el informe de Blix muestra la necesidad de dar más tiempo a las inspecciones. Seguramente se pedirá a Blix que informe nuevamente al Consejo de Seguridad, probablemente el 1º de marzo, pero eso podría resultar su último informe salvo que haya un cambio de actitud por parte del gobierno iraquí.
Pese a las promesas de Bagdad de alentar a los científicos y técnicos iraquíes para que vayan a las entrevistas sin testigos, la ONU no considera que ninguno de los encuentros hasta ahora haya sido realmente privado. Esa evaluación desacredita las señales de compromiso por parte de Irak sobre las entrevistas. También ha causado frustración dentro de la ONU, donde los funcionarios saben que, a no ser que demuestren progreso, las inspecciones podrían ser abandonadas, e Irak puede entrar en guerra.
Traducción: Celita Doyhambéhère.