Los diversos atentados perpetrados desde 2007 a la actualidad en por lo menos ocho ciudades de India son atribuidos a distintas organizaciones lideradas por los Indian Mujahiddin, considerados por la policía local como principales sospechosos de los atentados de ayer en Bombay. Comunicándose con el mundo exterior a través de Internet y utilizando la firma “Al Arabi”, los Indian Mujahiddin se convirtieron en los nuevos protagonistas del terrorismo indio. Nacidos de una costilla del Movimiento de los Estudiantes Islámicos de la India (SIMI), según los servicios secretos de Nueva Delhi, los Indian Mujahiddin tienen un estrecho vínculo con el grupo terrorista paquistaní Lashkar-e-Taiba que, desde hace una década, lucha contra el control indio de la región de Cachemira.