EL MUNDO
Cruzaron la línea roja
El extremismo palestino, esta vez del Frente Popular para la Liberación de Palestina, reivindicó el atentado suicida que ayer sacudió un centro comercial en la colonia judía de Karnei Shomron, causando tres muertes -con la del suicida– y alrededor de 30 heridos. Y pese a la advertencia de Israel de que el uso por los palestinos de un nuevo misil Kassam-2 como el lanzado la semana pasada implicaría el cruce de una “línea roja”, el ala militar del movimiento islámico Hamas se adjudicó el disparo de ayer de un misil de ese tipo –que tiene un alcance de hasta 8 kilómetros– contra Kzar Aza, un asentamiento israelí al norte de Gaza, sin que se informara de daños ni víctimas. Por su parte, el ejército israelí invadió el campo de refugiados de Al Bureij, centro de la Franja de Gaza, donde mató a tres palestinos, hirió a 16 y tomó control del edificio de las fuerzas de seguridad de la Autoridad Palestina. Nazeeh Abú Assuba, miembro del grupo islamista Hamas, murió cuando pasaba cerca de un coche que explotó en Jenín (Cisjordania) en el momento en que un avión israelí sobrevolaba el lugar y presuntamente teledirigía la explosión.