EL MUNDO › BRITANICOS Y ESTADOUNIDENSES DEJAN INDIA
A rajar que viene la bomba
Por Luke Harding y Richard Norton-Taylor * desde Nueva Delhi
El canciller británico Jack Straw instó anoche a sus connacionales a dejar India inmediatamente por su “peligrosa” escalada militar con su rival nuclear, Pakistán, y aconsejó a sus conciudadanos a no viajar a la región. El anuncio de Straw vino poco después de que el Departamento de Estado norteamericano dijera que los diplomáticos estadounidenses prescindibles serían sacados de India e instara a los 60.000 norteamericanos que viven en el país a que se fueran. La decisión británica, que concierne a 20.000 personas, fue tomada luego de que informes de inteligencia occidental advirtieran sobre un nuevo ataque terrorista en India o en la parte bajo control indio en Kashmir, que podría disparar la guerra entre ambos países, y derivaría en un intercambio nuclear.
“La situación es extremadamente grave. Podría llevar rápidamente a una guerra nuclear –dijo anoche una fuente bien ubicada–. Este es un escenario creíble, millones de personas morirían y habría daños sin precedentes a la infraestructura”. Fuentes diplomáticas insistieron en que ese escenario apocalíptico era “muy real”, agregando que ni el gobierno indio ni el paquistaní han comprendido la seriedad de la situación, y que a los líderes de ambos países les sería muy difícil dar marcha atrás por razones de política doméstica. El gobierno británico teme que un importante incidente terrorista ocasionado por extremistas con base en Paquistán o en la parte bajo control pakistaní de Kashmir provocaría una ataque masivo de la India. Los indios, de acuerdo con informes de inteligencia, están preparados para una respuesta nuclear por parte de Pakistán, que tiene menos fuerzas convencionales y que, a diferencia de India, no se ha comprometido a no atacar primero.
Fuentes diplomáticas dijeron anoche que, a diferencia de las partes en la Guerra Fría, India y Pakistán no son conscientes de los peligros de que una escalada del conflicto derive en un intercambio nuclear, y que sus líderes no han tenido un “teléfono rojo” para comunicarse personalmente. Agregaron que la situación se ha deteriorado de manera drástica en la última semana a pesar de los desesperados esfuerzos diplomáticos, incluida la visita de Straw a la región. El presidente George W. Bush está enviando a su secretario de Defensa Donald Rumsfeld, a la región la semana próxima para reforzar la presión sobre el líder paquistaní, el general Pervez Musharraf.
Paul Wolfowitz, segundo de Rumsfeld, advirtió ayer que el conflicto entre India y Pakistán sería “algo intermedio entre terrible y catastrófico”. Desde Singapur, Wolfowitz dijo que los EE.UU. retirará la ayuda a Pakistán a menos que el general Musharraf cumpla con su promesa de terminar con el “terrorismo transfronterizo”.
* De The Guardian de Gran Bretaña. Especial para Página/12.