La dirigente de la Coalición Cívica bonaerense Margarita Stolbizer se reunirá esta semana con el presidente de la CRA, Mario Llambías, para empezar a conversar sobre su posible incorporación a la CC. Cerca de la líder de GEN advirtieron que se trata sólo de conversaciones preliminares, dado que el ruralista no tomará ninguna decisión de presentarse hasta que termine su tarea frente a la CRA, en agosto. “Pero si quiere ser candidato, nos encantaría”, reconocen en la CC.

El encuentro con el dirigente agrario es otra señal de autonomía de Stolbizer con respecto a la líder de la CC, Elisa Carrió. Llambías no tiene precisamente la mejor relación con Carrió: todos recuerdan en la CC que cuando Lilita quiso subir al palco para participar de los festejos de la victoria con el voto “no positivo” en el Senado, Llambías hizo un gesto con la cabeza y le impidieron el paso. Una imagen que quedó grabada por las cámaras.

En cambio, con Stolbizer y varios de sus diputados –como Francisco Ferro o el ex intendente de Bahía Blanca Jaime Linares– los une una larga relación. Con la líder de GEN, Llambías compartió varias jornadas en la ruta e incluso una imputación en San Nicolás por un corte de ruta. Ambos terminaron con falta de mérito.

Stolbizer persevera en su proyecto de sumar candidatos de las entidades rurales y ve a Llambías, que tiene domicilio en la provincia de Buenos Aires, como el que más se acerca al perfil de la CC. “Es uno de los perfiles que nos interesa si quisiera participar. Tanto Pancho Ferro como yo tenemos contacto con él desde hace años”, reconoce Linares a Página/12.

“Eso no significa que avancemos demasiado en este momento –estima el dirigente de GEN–. Mario es un hombre muy serio y tiene mandato hasta agosto. No va a tomar ninguna decisión en este momento. Hoy no, pero después de agosto es otra cosa.”

En el entorno de Llambías señalaron ecuménicamente que están “en diálogo con todos los partidos políticos”. “Menos con el Frente para la Victoria, que no nos recibe”, aseguraron. Con Stolbizer será la primera con la que se reúna mientras escucha el canto de sirena de las urnas.