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El diputado nacional Enrique Thomas es el hombre que logró unir a Felipe Solá y Julio Cobos. El legislador mendocino preside el bloque del ex gobernador bonaerense en Diputados y, además, es el principal aliado peronista del vicepresidente en su provincia. A fin del año pasado consiguió que ambos se mostraran juntos en el lanzamiento de su fuerza local y ahora alienta la incorporación del cobismo al nuevo frente bonaerense integrado por Solá, Francisco de Narváez y Mauricio Macri. “Hay grandes posibilidades de que el cobismo en Capital termine llegando a un acuerdo con las fuerzas del PRO”, advierte Thomas a Página/12. Detractor de un acercamiento del vicepresidente a la Coalición Cívica, Thomas asegura que “Cobos tiene mucha, mucha más afinidad con Solá que con Lilita Carrió” y ratifica que en Mendoza habrá un frente “partido a partido” entre la UCR, el ConFe y el PJ disidente.

–¿Cómo ve el acuerdo entre Solá, De Narváez y Macri?

–Ha sido un paso muy inteligente, que cambia rápidamente el mapa político en la provincia de Buenos Aires, pero también en todo el país. Hemos conversado con Felipe la necesidad de simplificar la oferta democrática a los argentinos. El que quiere votar la forma de hacer política de Kirchner ya sabe lo que tiene que hacer. Nosotros tenemos que ordenar la otra opción, la moderación, la racionalidad, el diálogo y el consenso. Es un paso estratégico cuyo objetivo central es cambiar las mayorías legislativas. Esa es mi obsesión. Para los que estamos en el Congreso es clave para hacer una Argentina más racional, más vivible y criteriosa. Es imposible disentir dentro del bloque legislativo del kirchnerismo: hay un sistema de presión y sometimiento, hay órdenes que se tienen que cumplir y eso no va a cambiar.

–¿Cómo queda el espacio del vicepresidente con la conformación de dos núcleos opositores: Solá-De Narváez-Macri y, por otro lado, UCR-Coalición Cívica-PS?

–Estuve conversando con Julio y en Mendoza va a haber un frente que va a tener un éxito electoral aplastante, compuesto por radicales, demócrata cristianos y peronistas como yo. A nivel nacional, Cobos tiene los brazos abiertos para sumarse a este frente. Puede aportar mucha claridad al electorado. Espero que el cobismo pueda integrarse a distintas expresiones del peronismo en los distintos distritos. Creo que Cobos tiene mucha, mucha más afinidad con Solá que con Lilita Carrió. He trabajado con él, lo conozco y no voy a descansar hasta que esta opción se pueda dar en 2009, porque el 2011 todavía está muy lejos y pueden pasar mil cosas.

–Desde el cobismo dicen que presentarán candidatos propios en la Capital Federal, ¿no sería una contradicción que se sume a un frente que integra el PRO en la provincia de Buenos Aires?

–No, creo que la figura de (la vicejefa de Gobierno porteño) Gabriela Michetti como candidata tiene una gran fortaleza y ella tiene una excelente relación con Julio Cobos. Hay grandes posibilidades de que el cobismo en Capital termine llegando a un acuerdo con las fuerzas del PRO. Esos son los dolores de parto de un espacio tan inmenso: hay que trabajar para hacerlo más coherente. En mi opinión, el cobismo tiene mucha afinidad con Michetti y otras figuras de PRO, así que le haría mucho bien un acuerdo.

–En Mendoza algunos dirigentes cobistas se resisten a una alianza con el peronismo que usted encabeza...

–En verdad hay dos visiones: una de una UCR ampliada y otra de un frente plural. Esa última es la que corresponde, porque Cobos representa mucho más que la UCR. Gracias a Dios, se está imponiendo la segunda figura que es la del frente y aquellos dirigentes que no lo entiendan así están demorando su concreción. La UCR es un partido centenario que tiene su peso, pero será una pata como las demás. Habrá que tener mucha generosidad para dejar atrás proyectos personales en pos de la constitución del frente.

–Pero César Biffi, el ex candidato a gobernador de Mendoza por el cobismo, pronosticó hace unos días la desaparición del ConFe y la reunificación de la UCR.

–Fui compañero de fórmula de Biffi en 2007 y es un amigo, pero no comparto esa visión porque el ConFe tiene 17 mil afiliados y es una fuerza real. Será una pata de este frente al igual que la UCR. El tiene que estar, porque es una persona muy valiosa.

–¿Cómo se definirían entonces las candidaturas entre esos partidos?

–Se harán internas abiertas entre el ConFe y la UCR. Más allá de que van a quedar espacios para el peronismo disidente. Esto tenemos que aceptarlo todos.