La propuesta de que los intendentes se presenten como primer candidato a concejal en sus distritos disparó un intenso debate que está recorriendo al peronismo bonaerense. La iniciativa, que propone plebiscitar la gestión a nivel local y asegurar el compromiso con la lista del Frente para la Victoria, se hizo pública anteayer en Lanús, en un encuentro del gobernador Daniel Scioli con jefes comunales del sur del conurbano. La propuesta fue ratificada ayer por intendentes de populosos municipios del Gran Buenos Aires. “Todos nosotros estamos dispuestos a utilizar estos recursos de la democracia para ratificar el rumbo económico que está llevando adelante Cristina Fernández”, aseguró Julio Pereyra, intendente de Florencio Varela y titular de la Federación Argentina de Municipios. Los otros jefes comunales que ratificaron su respaldo fueron Francisco “Barba” Gutiérrez (Quilmes), Fernando Espinoza (La Matanza), Darío Díaz Pérez (Lanús), Daniel Di Sabatino (San Vicente) y Osvaldo Amieyro (San Fernando), entre otros. Sin embargo, la alternativa también encontró resistencias en hombres influyentes del PJ bonaerense, como Hugo Curto (Tres de Febrero). “No me parece una buena idea para un caso como el nuestro, que tengo cinco mandatos como intendente”, declaró Curto a Página/12.

La posibilidad de que los intendentes vayan en el primer lugar de la lista de concejales comenzó a circular por la dirigencia peronista a partir de un comentario del intendente de Quilmes. “Si ustedes van, hasta yo me animo a ir como cabeza de lista para concejal”, dijo Gutiérrez. Fue el miércoles en Lanús, en un encuentro de Scioli con los intendentes de la tercera sección electoral, sur del conurbano. El desafío del Barba fue tomado al vuelo por los otros intendentes que lo acompañaban. Eran 18 intendentes: estaban todos los jefes comunales de la tercera sección, con la excepción de Alejandro Granados (Ezeiza). También se encontraban allí el presidente provisional del Senado, José Pampuro, y el vicegobernador Alberto Balestrini, titular del Senado bonaerense. En esa reunión, Scioli reconoció que estaba dispuesto a ser candidato a diputado nacional por la lista del FPV. Algo parecido ofreció Balestrini, quien no descartó poner su apellido en la lista de candidatos del oficialismo.

Al escuchar esas promesas los intendentes parecieron contagiarse del clima de entusiasmo y compromiso público. Entonces salieron a decir que estaban dispuestos a ponerse a la cabeza de las listas de concejales. El lema que explicaba todos los movimientos era “defender con el nombre y el cuerpo” el proyecto iniciado en 2003. Tras la reunión con Scioli y Balestrini, los intendentes comenzaron a hacer declaraciones en favor de la alternativa de plebiscitar la gestión municipal. Ayer continuó la seguidilla de pronunciamientos. “Voy a aparecer en la lista (de concejales)”, aseguró Díaz Pérez. “Si tengo que encabezar la lista en mi distrito, lo voy a hacer porque está en juego el futuro del país”, coincidió Espinoza. “Si en este camino a mí me necesitan para estar en un lugar, yo voy a estar”, dijo Amieyro. En su contacto con la prensa, Díaz Pérez admitió que en caso de postularse como concejal su candidatura sería “simbólica” o “testimonial” y que, pasadas las elecciones, renunciaría a la banca en el Concejo y continuaría su mandato al frente del municipio.

Con el paso de las horas, la alternativa plebiscitaria siguió sumando apoyos. Así se sumaron Baldomero “Cacho” Alvarez de Olivera (Avellaneda) y Jorge Rodríguez Erneta (Villa Gesell). “Definitivamente estaremos. Si es necesario integrar una lista como candidato a concejal, para aportar y apoyar un proyecto en el que creemos”, aseguró Alvarez. Como ya lo habían hecho en Lanús, los intendentes aprovecharon cada aparición en los medios para subrayar su compromiso con la defensa del modelo económico implementado a partir de 2003. “Yo quiero una mayoría reflexiva y una minoría respetuosa. En el marco de lograr estas cuestiones, si tengo que ocupar un lugar, lo voy a ocupar”, aseguró Amieyro. “Vamos a reforzar el compromiso con el proyecto de país, con la estabilidad económica y con el futuro”, prometió Gutiérrez. “Si hay que ser porteros de escuela, estaremos todos de guardapolvo y colgados de la campana”, fue la metáfora que eligió Di Sabatino.

Pero la velocidad con la que se propaló la propuesta también generó cortocircuitos y malestar entre los intendentes que no habían sido consultados. El portavoz público de esa opinión fue Curto, uno de los pesos pesados de la estructura del PJ, con mucho predicamento en la primera sección electoral (norte y oeste del conurbano). Consultado por Página/12, Curto dejó en claro que él no se presentará como primer candidato a concejal. “A mí nadie me dijo nada y no estuve en ninguna reunión en que se haya mencionado el tema. Esta propuesta puede ser útil para algunos municipios nuevos, donde gobiernan chicos que tuvieron su primer mandato hace poco. No es lo mismo en nuestro caso. Yo tengo cinco mandatos como intendente y el compañero o la compañera que vaya encabezar nuestra lista va a tener el acompañamiento de la sociedad”, afirmó.

Según pudo saber Página/12, Curto no es el único intendente peronista que no está de acuerdo con la iniciativa. La misma posición sostendría el intendente Jesús Cariglino (Malvinas Argentinas), y habría algunos más. “Esto cayó mal en algunos. No están de acuerdo con estrategia”, contó a este diario un dirigente bonaerense, con presente de legislador, que conoce muy bien los códigos de las intendencias del conurbano.