Desde Nueva Delhi

Ni el eco de las bocinas enloquecedoras de un tránsito que transforma a los autos, micros, bicicletas y por qué no bueyes en una masa informe llega al interior del hotel Maurya Sheraton. Sólo se escucha la tenue melodía de música india en el salón donde más de cien empresarios argentinos empiezan a sondear o a cerrar negocios con sus contrapartes indios. “Esta visita muestra la voluntad de la India de acercarse a la Argentina a nivel gubernamental. Se van a intensificar las relaciones con un plan de acción que tiende a convertirse en una estrategia. Los dos países vienen con grandes coincidencias bilaterales en las negociaciones de la Organización Mundial de Comercio pidiendo por la baja de los subsidios agrícolas en los países desarrollados”, explica el canciller, Jorge Taiana. La comitiva oficial aterrizó ayer en Nueva Delhi, pero recién hoy empezarán los encuentros políticos que encabezará la presidenta Cristina Fernández de Kirchner con la plana mayor del poder indio.

La ministra de Producción, Débora Giorgi, le pone números al afianzamiento del vínculo con este país: “En la Argentina se radicaron alrededor de diez empresas indias que invirtieron más de 1000 millones de dólares” y detalla que las áreas de mayor complementariedad se dan en “productos químicos orgánicos e inorgánicos, plásticos y cauchos, y manufacturas de hierro y acero, además de software”. Giorgi recuerda que la metalúrgica Acindar fue comprada por capitales indios y destaca que “Tata Consulting Service, especializada en servicios de software para la realización de negocios, invirtió 15 millones de dólares en el parque tecnológico San Patricio en Barracas con un plan de empleo que prevé 1400 puestos de trabajo en tres años”. La empresa farmaceútica Glenmark invirtió 26 millones de dólares para exportar drogas oncológicas desde el parque industrial de Pilar. De capitales indios, Glenmark factura en el mundo más de 2000 millones de dólares por año.

Desdichas y tentaciones

La desmesurada cantidad de población y el crecimiento sostenido promedio del 8 por ciento del Producto Bruto Interno convirtieron a India en un mercado más que atractivo. Si bien se calcula que unos 800 millones de los 1100 millones de habitantes viven con apenas medio dólar por día, hay 300 millones de una clase media que se afianza y consume y 76 mil considerados millonarios en dólares. Las cifras congelan el impacto que provocan los millones que mendigan en las calles y viven a la vera de los caminos en carpas o chozas de adobe. Son los “intocables”, definidos así por las castas superiores que privándolos de contacto los condenan a la marginación infinita.

Es en esos 300 millones de personas que superan la población de Estados Unidos donde miran los países que apuestan a India. El dirigente de la Unión Industrial Argentina, Ignacio de Mendiguren, hace caso omiso de las críticas de esa entidad al Gobierno por las relaciones con Techint o la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y reivindica los contactos con India. “China y la India representan el 40 por ciento de la población mundial, India crece por año 100 mil millones de dólares, un tercio del PBI de nuestro país. Eso define la importancia de a qué países ir a abrir mercados. India, además, tiene la ventaja de que nos compra manufacturas de origen industrial (aceites, oleaginosas, grasas). China es distinto, ellos elaboran dentro de su territorio”, reseña De Mendiguren, quien aspira a abrir con su contraparte indio una especie de agencia para agilizar los negocios entre ambos países.

Después de horas de charlas cara a cara con potenciales clientes o socios indios, los empresarios argentinos deambulan por el lobby del hotel. Carlos Bulgheroni, el poderoso dueño de Bridas, busca el resquicio para sentarse en un aparte con Taiana. El ministro de Planificación, Julio De Vido, pasó por las mesas de negociaciones y centra las expectativas en el acuerdo de cooperación nuclear que firmará hoy con el primer ministro, Manmohan Singh. La titular de la Comisión Nacional de Energía Atómica, Norma Boero, integra la comitiva. Hoy continuarán las rondas de conversaciones que se replicarán mañana en Mumbai (ex Bombay), capital financiera de la emergente potencia india, donde hace más de un año la Argentina abrió un consulado para facilitar el intercambio entre ambos países.