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“De la exclusión se sale con políticas consensuadas y de largo plazo” y éste “no es un problema sólo del Estado, sino de todos los sectores”, afirmó a Página/12 el obispo Fernando Bargalló, presidente de Cáritas Argentina. Para Gabriel Castelli, director del organismo asistencial de la Iglesia Católica, “el problema más grave es que nadie quiere renunciar a sus intereses particulares en pos de una idea que apunte al bien común independientemente de quién sea el dueño de la propuesta”. Advirtió también que éste no es un señalamiento “sólo para los partidos políticos, porque sucede lo mismo con los sectores empresarios y hasta con las organizaciones sociales”.

El diálogo se produjo a raíz de la realización mañana de la colecta anual de Cáritas que en esta ocasión tendrá como lema “Construyamos juntos una patria sin excluidos”.

¿Cómo se puede alcanzar este propósito en un escenario donde sólo parecen subrayarse las diferencias?, se le preguntó al obispo. “No sé si alguien tiene la respuesta, pero es evidente que hay que ir haciendo caminos”, dijo y señaló que sería importante “que cada sector pudiera reconocer sus propios límites y falencias y los valores y logros de los demás sectores, porque en general la actitud suele ser toda la contraria”. Según Bargalló, éste sería “un camino evangélico de examen de conciencia por parte de cada sector y al mismo tiempo una mirada de valoración hacia los otros. Porque hasta tanto no aprendamos a valorarnos los unos a los otros será difícil sentarse en una mesa a consensuar políticas comunes”. Agregó que “cuando se logran puentes de comunicación, respeto y valoración, se pueden vencer las aparentes distancias ideológicas”.

“En medio de la creciente euforia por el campeonato mundial de fútbol, la colecta anual de Cáritas se hace presente con un mensaje concreto para toda la sociedad, porque no podemos vivir tranquilos sabiendo que hermanos nuestros carecen de lo necesario, no sólo para mantener la vida, sino para poder desarrollarla”, siguió diciendo Bargalló.

Admitió, sin embargo, la posibilidad de que palabras como “excluidos” se vayan vaciando de contenido “así como ha perdido también significado la palabra pobres o pobreza. Pero hay que insistir en estos temas porque representan una realidad”. Dijo Bargalló que “para la gran mayoría hablar de pobres y de pobreza lleva a pensar sólo en los ingresos económicos. Y no sólo eso es la pobreza. Usamos excluidos para hablar no sólo de aquellos que carecen de algo, sino también de los que quedan fuera, los sobrantes, los que no son tenidos en cuenta”.

Por eso, sostuvo, “el lema de este año tiene dos partes. Una esperanzadora y propositiva: ‘Construyamos juntos una patria’. Y otra que denuncia que hay excluidos que no entran en este único hogar. Por aquello de que hay inequidades muy grandes de concentración de riquezas y oportunidades en unos pocos, y marginación y carencias para desarrollar la vida en otros”.

Según Castelli “para romper el círculo intergeneracional de la pobreza las estrategias son educación y trabajo” porque “el rostro de la pobreza es la dificultad de acceder a la educación de calidad, el déficit habitacional, la precariedad laboral, la falta de un sistema de salud que contenga”. Pero advirtió también que cualquier estrategia de este tipo “es siempre un paliativo, porque lamentablemente no hemos podido consensuar un modelo a largo plazo para que todo esto se revierta consistentemente y no por ciclos de acuerdo con cómo funcione la economía. No es sólo problema de un gobierno. Necesitamos políticas consistentes para los próximos veinte años si queremos encontrar soluciones serias”, agregó.

El obispo Bargalló comentó que particularmente para las tareas de educación que realiza Cáritas “hemos encontrado alianzas importantes con el mundo empresario” y que “la mayoría de los programas de inclusión educativa son financiados por empresas”. Pero también “en los últimos años hemos cooperado mucho con el Ministerio de Educación de la Nación, con el cual tenemos una muy buena relación. Estamos trabajando en un proyecto para impulsar la difusión de la implementación de la Asignación Universal por Hijo y en programas para que los chicos vuelvan a los colegios”, informó Castelli.

La colecta de Cáritas se realiza en todo el país mañana y quienes deseen aportar lo pueden hacer en las parroquias católicas, telefónicamente llamando al 0810-222-74827 o por Internet a través del sitio www.caritas.org.ar.