EL PAíS
Kirchner ya puso fin al proyecto de ir con Carrió
La relación entre el gobernador de Santa Cruz y la líder del ARI es buena y muchas sus coincidencias. Pero la falta de voluntad frentista de Lilita redobla su decisión de jugar con Duhalde.
Por Felipe Yapur
Los hombres que coordinan la estrategia política de Néstor Kirchner saben que los próximos días son cruciales y definitorios en cuanto a la pelea presidencial. Para éstos, el santacruceño tiene dos claras opciones en el inminente escenario electoral: Eduardo Duhalde o Elisa Carrió. Si de preferencias se tratara, priorizarían a la líder del ARI: “Una fórmula con Lilita nos volvería imparables”. Sin embargo, la decisión de la chaqueña de no hacer alianzas dejó de lado la opción deseada. Así las cosas, la alternativa Duhalde es de cajón. Eso sí, los hombres de Kirchner aseguran que el que pide pista es el Presidente y, por lo tanto, no serán víctimas del denominado “abrazo del oso”.
Si de preferencias se trata, la gente de Kirchner no duda en decir que lo mejor sería hacer un frente con Carrió. Claro, después hay una lista de “observaciones” para con la chaqueña. Sin duda, se hubieran minimizado si ella hubiera aceptado competir juntos en los próximos comicios. Si bien se cuidan de criticarla, los colaboradores más estrechos de Kirchner sostienen que el principal inconveniente que encontraron en el proceso de acercamiento a Carrió –que comenzó en julio cuando junto a Aníbal Ibarra firmaron un documento por la caducidad de los mandatos– es la falta de un canal de comunicación válido en el ARI. “Nadie habla por Carrió, todos son intérpretes de sus dichos y así no se puede acordar absolutamente nada”, reconoció a este diario uno de los principales operadores del gobernador de Santa Cruz. El operador no puede sino sonreír cuando reconoce que esta situación le hace acordar a las interpretaciones que solía hacer la conducción de la Juventud Peronista de los dichos de Juan Perón durante su vida en el exilio e incluso en su último gobierno.
Los operadores de Carrió ratifican los dichos de los colaboradores de Kirchner sobre la decisión de la chaqueña de “competir sola por la presidencia”. Reconocen también que hubo contactos con la gente del santacruceño pero que no llegaron a traducirse en un encuentro entre el gobernador y la diputada porque Carrió no quiso. Esto no evitó que aquellos aristas que evaluaron la posibilidad de un acercamiento con Kirchner le encontraran al precandidato justicialista algunas críticas: “Kirchner siempre habla de frentes políticos pero nunca hizo nada, ni siquiera insinuó competir por fuera del PJ”, señaló a Página/12 uno de los consejeros políticos de Carrió. Consultados sobre este punto, los hombres de Kirchner justifican con firmeza su permanencia partidaria: “Si ella no emite una señal para armar un frente, no vemos por qué tenemos que abandonar el partido. No quiero ni pensar lo que podría pasr si nos vamos del PJ y después ella no arregla, perdemos todo lo que teníamos”.
Con el escenario prácticamente descartado, en el equipo de Kirchner se animan a pensar en voz alta cómo debería haber sido la fórmula presidencial de este supuesto frente con el ARI. Cae de maduro que ellos consideran que debería haber sido Kirchner-Carrió porque el santacruceño tiene buenos antecedentes como administrador. Reconocen también que Carrió lo potencia “por su alta imagen de honestidad”. Aseguran que la chaqueña encabezando la fórmula no sería tan “dinamita” porque el flanco más débil de la diputada es su nula experiencia como gobernante. Sostiene que la conclusión a la que arribaron no es caprichosa: “Lo dicen las encuestas”, repiten al mismo tiempo que reconocen –con poca convicción– que el santacruceño no tendría ningún problema de ser el vice de Carrió. “En eso Néstor es muy generoso”, dicen sus seguidores. “Nunca dio muestras de ello”, retrucan en el ARI.
Hay un dato más por lo que los aristas son refractarios a una posible alianza con el patagónico y no es otro que su cercanía con el Presidente. “Si Lilita acordara con Kirchner por atrás se colaría Duhalde. Es un abrazo del oso que terminaría con las posibilidades políticas de Carrió”, aseguró uno de los colaboradores de la candidata del ARI. Prácticamente descartado la opción Carrió, en la carpa del santacruceño la energía se concentra en las negociaciones con Duhalde. Eso sí, se preocupan en destacar que el que levantó el teléfono fue el propio Presidente y no el gobernador patagónico. “El llega a nosotros por necesidad y no por convicción”, dicen los kirchneristas. Allí reside la razón por la que consideran que la transformación de Kirchner en el candidato oficialista no será un salvavidas de plomo. “Estamos en condiciones de ganar porque el electorado se polarizará entre el menemismo versus el antimenemismo que representa Kirchner”, señalan sus colaboradores. Sin embargo, y más allá de que creen que la definición del acuerdo con Duhalde es inminente, dejan trascender que todavía hay “un espacio” para acordar con Carrió. En el ARI lo niegan rotundamente.