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Primero lo reconoció en privado, el domingo lo admitió públicamente y ayer cuando no habían pasado 24 horas desde que Eduardo Duhalde afirmara que no era partidario de que se realizaran elecciones internas en el PJ, Miguel Saredi, un desconocido diputado del duhaldismo bonaerense, dejó en la mesa de entradas de la Cámara baja una iniciativa legislativa para utilizar “por única vez” el sistema de ley de lemas en la próxima elección presidencial. Más allá de la coincidencia, minutos antes de la oficialización del proyecto, el principal referente de Duhalde en el Congreso, Eduardo Camaño, repetía que la “única herramienta para solucionar la actual crisis de los partidos políticos es la implementación electoral del sistema de lemas”. Aunque los hombres del Presidente no terminan de mostrar todas sus cartas, está claro que por ahora apuestan a ganar tiempo y a evitar la interna.
Todos los tiempos electorales internos fueron inexorablemente incumplidos. Y los que se avecinan también parecen ser una promesa en el aire. Claro que la explicación oficial habla de las dificultades técnicas para concretarlos. Algo parecido sugirió Camaño, titular de Diputados y a la sazón también presidente del congreso partidario. “Está claro que la fecha del 23 de febrero para la interna es incumplible”, afirmó el quilmeño en diálogo con este diario y un reducido grupo de periodistas parlamentarios. La frase parecería de ocasión si no fuera porque luego la reafirmó al asegurar que estaba previsto convocar nuevamente al congreso del PJ para la primera quincena de enero. “Entre el 8 y el 10 vamos a convocar al Congreso para revisar las fechas electorales”, aseguró. Paso seguido sugirió la posibilidad de proponerle al cónclave hacer suya la propuesta de la ley de lemas.
Cuando se les pregunta a los hombres del duhaldismo si no temen que la iniciativa sea calificada como inconstitucional, máxime sabiendo que la Cámara Electoral ha dado a conocer oficiosamente su oposición al engendro legal, los duhaldistas no dudan en responder que “para el caso, la Justicia también puede declarar inconstitucional la convocatoria electoral o la ley de acefalía”. La respuesta sugiere otra posible jugada del oficialismo: lograr un fallo judicial que postergue las elecciones presidenciales y le obligue a Duhalde a quedarse en la Rosada hasta el 10 de diciembre del 2003, entendiendo que ése fue el espíritu de la Asamblea Legislativa que lo consagró Presidente y que de esta manera se completa el mandato trunco de Fernando de la Rúa.
En el entorno de Duhalde no dudan en calificar de apresurada su llamada a elecciones. Si bien tienen en cuenta el contexto en el que éste se concretó, los fusilamientos en Avellaneda de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, ahora ya con la sangre seca y con algunos guarismos a favor los obsesiona encontrar a los herederos que les garanticen los espacios de poder necesarios para continuar jugando al juego que más les gusta.
“Mi objetivo es darles una posibilidad a los partidos políticos para superar su crisis”, dijo el autor de la iniciativa a este diario al explicar las motivaciones que lo llevaron a solicitar la aplicación de la ley de lemas. Aunque el expediente sólo lleva su firma, Saredi no duda al responder que “estoy seguro que si hoy hubiera habido más diputados presentes en ‘La Casa’ muchos habrían firmado también”. Incluso aventuró que la propuesta podría también servirle a la chaqueña Elisa Carrió “si es que acepta conformar un lema con sus ex aliados socialistas”. A pesar de su optimismo y aun en caso de que el bloque peronista decida encolumnarse detrás de esta propuesta, es sumamente difícil que la medida logre los votos necesarios para convertirse en ley.
Aunque aparentemente a los radicales les permitiría saldar su actual incertidumbre, en diálogo con este diario los dos precandidatos de la UCR rechazaron cualquier intento de instrumentar el sistema. “Es cierto que el sistema político está sumamente fragmentado. No hace falta demostrarlo,ahí está la crisis del PJ, la nuestra, la del ARI en su pelea con el Socialismo y la de Luis Zamora. Pero la ley de lemas no resuelve la crisis, en todo caso la profundiza. A lo sumo resolverá la crisis del justicialismo ya que en ninguna provincia de las que está en vigencia, aglutinó al sistema político”, aseguró Leopoldo Moreau. Para Rodolfo Terragno “la ley de lemas es un sistema según el cual quien cree estar votando por Juan está en verdad votando por Pedro. No hay sistema electoral perfecto, pero creo que, como mínimo, los ciudadanos deben tener la garantía de que sus votos no son endosables”.
Quienes aparecen como principales perjudicados con un sistema como el de lemas son los seguidores de Carrió. “Desde la Asamblea Legislativa en la que se eligió a Adolfo Rodríguez Saá y cuando se comenzó a hablar de utilizar la ley de lemas nosotros sentamos posición diciendo que esta iniciativa era inconstitucional”, le señala a Página/12 la diputada Marcela Rodríguez, principal asesora de Carrió en temas constitucionales. Para la joven legisladora, propuestas como la de lemas son un intento del PJ para “salvar su crisis trasladándosela a toda la sociedad”. Al momento de explicar las razones de la inconstitucionalidad, afirma que “se viola el artículo 37 que dice que el voto tiene que ser universal e igual. Y en este caso en algunos casos se suman y en otros no. Entonces el voto no es igual”. También recuerda que “la Constitución precisa que la votación debe ser directa”. Por lo pronto para el duhaldismo todas las jugadas parecen débiles. Eso no quita que sigan buscando la llave de oro mientras la mayoría atiende otro juego.