EL PAíS › ACTO MENEMISTA EN FLORENCIA VARELA
El riojano en Buenos Aires
“Ahora habla de padrones truchos, pero el señor presidente provisional se olvida que fue elegido con esos padrones.” La frase sonó con esa lentitud gutural que suele elegir Carlos Menem para disparar sus dardos más estudiados. La multitud, compuesta por madres con hijos en brazos que habían llegado en micros, festejó con algunos aplausos aunque sin demasiado entusiasmo. Detrás de Menem se lo veía a Alberto Pierri, de camisa blanca y barba de unos días, que aplaudía las ocurrencias del riojano y lo atizaba con un “¡Vamos, vamos!”. “El es un senador trucho”, concluyó Menem apuntando a Duhalde, a quien acusó de estar al frente de una “dictadura”.
El acto de ayer, en Florencio Varela, fue para Menem su primer desembarco en la provincia de Buenos Aires luego de que su eterno enemigo anunciara la creación del “nuevo espacio peronista” que impulsa la candidatura de Néstor Kirchner. El riojano llegó a las siete de la tarde, bien custodiado y con su comitiva de siempre –Pierri, Alberto Kohan, y su candidato a vice Juan Carlos Romero –, y se subió a un escenario montado en las esquinas de San Martín y Dorrego. En ese lugar lo esperaba el diputado provincial Dardo Otonello (PJ), quien está enfrentado con el intendente local, Julio Pereyra.
En su discurso, Menem adoptó un tono bien confrontativo con Duhalde, a quien llamó con sorna “presidente constitucional”. “Si quiere ser candidato, que se presente y no se esconda detrás de otros candidatos”, cargó. Luego se quejó de las “maniobras” que, según él, está realizando el Gobierno para evitar que “se exprese la voluntad del pueblo”. En el acto se veían pancartas que parecían hechas a último momento. Una mostraba una foto de Menem y lo llamaba “el pequeño gigante riojano”. Como suele hacer, Menem elogió con palabras altisonantes su gestión de gobierno 1989-1995. “Los gobiernos más progresistas de todos los tiempos de la Argentina fueron el de Perón y el mío”, aseguró. Luego cargó contra Kirchner, a quien le auguró una derrota en las elecciones. “¿Cómo va a entrar si no tiene los votos de la gente, del pueblo ni de la militancia?”, chicaneó.