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Las fotos de Cristina Fernández y de Evita conviven con la bandera de Cuba y las manos de Escher en el despacho de la legisladora kirchnerista Gabriela Alegre. La ex subsecretaria de Derechos Humanos del gobierno porteño –que podría integrar la lista de legisladores– considera que el kirchnerismo tiene “grandes posibilidades de ganarle a Macri”. “Filmus seguramente por historia confronta más claramente con Macri”, advierte.

–¿Con cuál candidato se identifica: Filmus, Tomada o Boudou?

–Me identifico más, por mi historia, con Filmus. Me parece que está muy bien que haya tres candidatos. Hace pocos años, estábamos rogándole a uno que fuera candidato. Me parece que explicita un crecimiento enorme del proyecto nacional en la ciudad. Esta vez, tenemos grandes posibilidades de ganarle a Macri.

–¿Cómo se va a definir?

–Se va a ir decidiendo en función de cómo se encare la campaña y yo, por supuesto, voy a acompañar al que se defina desde la opinión de la Presidenta y desde la fuerza que hagamos las distintas fuerzas políticas.

–¿Por qué cree que Jaime Durán Barba les recomienda ir con Filmus y no con Boudou?

–No me lo explico. Por ahí, quieren un adversario claro: Filmus seguramente por historia confronta más claramente con Macri. O puede ser que coincidan con la teoría de Artemio López de que Boudou le puede robar votos por derecha.

–Bueno, desde el PRO lo tildaron a Boudou de “niño bien de la UCeDe”.

–Lo corren por izquierda los macristas y, en realidad, Boudou está totalmente a la izquierda de Macri: sólo con ver las medidas económicas que llevó adelante, como la nacionalización de los fondos jubilatorios. Macri dice que es capaz de rever esa medida si fuera presidente.

–Hay otras candidaturas, como la de María José Lubertino...

–Respeto mucho su trabajo como legisladora, pero creo que no le da el perfil para poder ser candidata.

–¿A quiénes incluiría en un frente de centroizquierda?

–Hay aliados como Carlos Heller, el Frente Grande, el Partido Humanista, el partido de Sabbatella, el ibarrismo...

–¿Qué rol piensa que tiene que jugar Aníbal Ibarra?

–No comparto esta lógica de posicionarse hacia lo más alto para después negociar y que les den algún lugar en las listas. Me parece falso. Ibarra, si bien expresa valores y un cierto posicionamiento en la ciudad, no tiene una base de militancia alrededor de él. Ese es uno de los motivos por los que yo preferí seguir militando en el kirchnerismo. En Aníbal a veces falta la sensación de que hay un proyecto de país. Creo que puede formar parte de esta alianza, pero no puede ser el que la conduzca. También por los resultados electorales que tuvo en las últimas elecciones.

–¿Y Jorge Telerman?

–¿Telerman forma parte de este espacio?

–¿En qué lugar ve a Proyecto Sur?

–El bloque de Proyecto Sur ha sido una de las mayores decepciones en los últimos años. Yo pensaba que iban a funcionar para hacer una oposición más seria al gobierno de Macri. Y la verdad es que es un bloque que no tuvo un buen funcionamiento, más allá de que tengo mucha afinidad con algunos diputados y diputadas. Y Pino Solanas fue una decepción en cuanto a pararse en el Grupo A. Y en oponerse en temas en los que claramente tenía que estar de acuerdo con el Gobierno, en un oportunismo electoralista que le funcionó sólo en la elección de 2009. Dudo que vuelva a funcionarle. En realidad, está traicionando su identidad y su historia.

–¿Qué cambia si el candidato del PRO es Larreta o si es Michetti?

–Michetti tiene más intención de voto que Larreta. Pero expresan exactamente lo mismo. No hay uno más bueno que el otro.

–¿La demanda millonaria de la gestión PRO contra los trabajadores del Teatro Colón sienta un precedente?

–Me parece un desastre: son trabajadores con derecho a huelga. Imaginemos qué pasaría si empiezan a cobrar a los trabajadores de aeroparque cuando los vuelos no salen o a quienes cortan los trenes. Lo atribuyo a las vacaciones, pero está muy mal que no hayan salido muchísimos sectores sindicales a repudiar lo que está haciendo el gobierno de Macri.