Mañana comenzará el juicio oral contra los dictadores Jorge Rafael Videla, Reynaldo Bignone y seis represores de la Escuela de Mecánica de la Armada por robo de bebés. La causa fue impulsada por las Abuelas de Plaza de Mayo, que convocaron a presenciar la audiencia pública que tendrá inicio a las nueve de la mañana en la sala Amia del subsuelo de los tribunales federales, ubicados en Comodoro Py 2002.

Videla y Bignone serán juzgados junto al ex general Santiago Omar Riveros, al ex almirante Antonio Vañek, al ex capitán de la Marina Jorge “Tigre” Acosta, al ex prefecto Jorge Azic, al ex marino Rubén Oscar Franco y al ex médico de la ESMA José Luis Magnacco por 34 casos de apropiaciones de hijos de desaparecidos durante la última dictadura.

Para mediados de año está previsto que se sume como acusado el represor Eduardo

Ruffo, quien deberá responder por el robo de Simón Riquelo, recuperado por su madre, que sobrevivió, 26 años más tarde.

Se agregará también a esa altura del año el caso del capitán retirado del Ejército y carapintada Víctor Gallo y su esposa, acusados de la apropiación de Francisco Madariaga Quintela, que el año pasado pudo reencontrarse con su padre Abel, quien al volver del exilio se sumó a Abuelas para buscarlo.

El Tribunal Oral Federal Nº 6, integrado por María del Carmen Roqueta, Julio Panelo y Domingo Luis Altieri, analizará los hechos cometidos en la maternidad clandestina de la ESMA y en Campo de Mayo, donde además se llevaba a secuestradas de otros centros clandestinos de detención a dar a luz. Días antes del inicio del juicio, Videla despidió a sus dos abogados. Fuentes del tribunal aseguraron que esa decisión no afectó el inicio de las audiencias porque ya le fue designado un defensor oficial.

La causa judicial fue abierta hace más de 14 años por una presentación de las Abuelas, que denunciaron el plan sistemático de apropiación de sus nietos, delito que quedó fuera del alcance de las leyes de punto final y obediencia debida. El juicio tiene cuatro partes querellantes, entre quienes están, además de Abuelas como institución, la titular de la entidad Estela de Carlotto, Rosa Roinsimblit y Juan Gelman. A cargo de la acusación estará el fiscal Martín Niklison.

El juicio ya tuvo la declaración de una testigo, la fundadora de Abuelas Nélida Chorobik de Mariani, de 87 años, que es querellante por el robo de su nieta Clara Anahí y pidió hablar antes del inicio de las audiencias porque temía no llegar en condiciones.

La llegada del expediente a su instancia oral se postergó y dilató tanto que cuatro de los acusados no llegaran a ser juzgados, los fallecidos Emilio Massera, Juan Bautista Sasiaiñ y Héctor Febres y el ex jefe del Ejército Cristino Nicolaides.

Todos los acusados deberán responder por los cargos de “sustracción, retención, ocultación y sustitución de identidad de menores de diez años” en distintos hechos. Por ejemplo, el ex prefecto Azic será juzgado como apropiador de la actual diputada y nieta recuperada Victoria Donda Pérez, cuyos padres están desaparecidos mientras que Acosta –como jefe de inteligencia del grupo de tareas 3.3 de la Armada– es acusado en principio por doce casos de robo de recién nacidos en la ESMA.

“Es importante contar con el acompañamiento de los medios y de la sociedad en general para que todos conozcan las atrocidades cometidas contra nuestras hijos y nietos y así nunca más se repitan estos crímenes”, señalaron las Abuelas en el comunicado de prensa en el que invitaron a presenciar la audiencia de mañana. El juicio se realizará los días lunes y martes así como un miércoles por medio, aunque durante marzo habrá debate martes y miércoles, ya que dos de los juzgados, Bignone y Riveros, enfrentan los lunes la última etapa de otro proceso oral.