El Gobierno condenó la detonación de un artefacto explosivo frente a la sede de la Unión Europea en Buenos Aires, que ocurrió ayer. En medio de la controversia con Gran Bretaña por la soberanía de las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y del debate por la expropiación de YPF que involucra a la empresa española Repsol, el Gobierno dejó en claro que rechaza “toda forma de violencia”.

En la madrugada, un artefacto explosivo detonó en la entrada del edificio donde está la sede de la Unión Europea, en Ayacucho al 1500, Barrio Norte. La bomba provocó la rotura de tres ventanales de un garaje vecino y daños en la puerta del edificio. La detonación ocurrió a las 2.45, por lo que no hubo heridos. Intervinieron bomberos, el SAME, personal de Metrogas y la Brigada de Explosivos de la Policía Federal, que no había podido determinar aún el tipo de explosivo. Tampoco tenían pistas sobre quiénes podían ser los autores del hecho.

Desde la Cancillería argentina informaron que ayer se comunicaron con la Unión Europea para transmitir la condena del Gobierno al atentado. El mensaje fue transmitido por el vicecanciller argentino, Eduardo Zuain, que se comunicó con el embajador de la Unión Europea, Alfonso Diez Torres, para manifestar la solidaridad del Gobierno. En cuanto a la detonación del artefacto explosivo, el vicecanciller argentino manifestó que el “pueblo y Gobierno” de nuestro país “condenan el hecho, como también toda forma de violencia”.