La ministra de Gobierno bonaerense, Cristina Alvarez Rodríguez, acusó al vicegobernador Gabriel Mariotto de “poner palos en la rueda” al gobierno de Daniel Scioli. Lo hizo a raíz de un pedido de informes sobre la pauta publicitaria bonaerense que suscribió Mariotto. El vicegobernador retrucó que “no se puede acusar al Senado de poner palos en la rueda” y remarcó que apoyó el pedido de informes porque el gobierno provincial “no tiene nada que esconder”. También dejó en claro que él responde a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y que el kirchnerismo no se pliega a “prácticas políticas tradicionales” ni a “valijas que vienen y van”.

Fue la primera exteriorización de diferencias entre Scioli y Mariotto. No la hizo el ministro de Seguridad, Ricardo Casal, ni tampoco el jefe de Gabinete, Alberto Pérez. Las palabras salieron de la boca de Alvarez Rodríguez que, además de ser la ministra de Gobierno bonaerense, está a cargo del PJ provincial luego de la renuncia de Hugo Moyano. “La verdad es que la actitud del vicegobernador sorprende. Nosotros estamos acostumbrados a actitudes como las del vicepresidente Amado Boudou o como las de nuestro anterior vicegobernador, Alberto Balestrini, que acompañaban y no ponían palos en la rueda”, sostuvo Alvarez Rodríguez, en alusión al pedido de informes por el uso de la publicidad oficial. La ministra consideró que ésa “es una herramienta de la oposición” y no del oficialismo. “Es lamentable que sectores oficialistas pidan informes al gobierno de la provincia, no es muy frecuente. Jamás nosotros votamos un pedido de informes a nuestra Presidenta”, dijo.

La ministra de Gobierno definió a Scioli como “un gobernador leal” al kirchnerismo. “Scioli demostró no sólo que acompaña al proyecto, sino que él es el proyecto nacional y popular en la provincia”, afirmó. “A Mariotto lo conozco de hace muchos años y es un gran militante y por eso sorprende y da tristeza su actitud”, consideró Alvarez Rodríguez. “Acá hay un bloque oficialista que tiene que acompañar a Scioli, y en vez de acompañarlo encontramos situaciones como ésta. No creo que quieran desestabilizarlo, pero sí creo que ponen palos en la rueda”, dijo la funcionaria.

No estuvo sola: en el mismo sentido se pronunció el presidente del Bapro, Gustavo Marangoni, quien le pidió a Mariotto tener “responsabilidad y lealtad”. “Algunos no quieren acompañar esta voluntad de cambio y transformación que tiene el gobernador y hasta a veces parece que la quisieran quebrar”, dijo. El secretario de Comunicación bonaerense, Juan Courel, se sumó a la idea: “Algunos quieren cansarlo al gobernador, pero si piensan que a Scioli le pueden ganar por cansancio, se equivocan”.

“No pueden decir que el Senado pone palos en la rueda. Basta de escribanías donde se resolvía sin iluminar la cosa y sin debate. Basta de acuerdos espurios”, replicó Mariotto. “Lo que pasa es que ahora hay discusión política, cosa que no ha ocurrido en otros años. No quiero saber cómo se sacaban las leyes en otros tiempos, cuando no había discusión y había tratamiento sobre tablas, cuando estaban todas sospechadas las actitudes de los distintos bloques”, devolvió el vicegobernador, que cuestionó a los sectores que “con valijas arreglan todo”. “La provincia no está acostumbrada a discutir política, está acostumbrada a arreglar las cosas de otra forma y yo no me voy a asociar a ese formato”, planteó.

“Yo respondo a la Presidenta de la Nación. Daniel Scioli, como el resto de los gobernadores, tiene que tener como conducción a nuestra Presidenta de la Nación. No entiendo dónde está el problema”, sostuvo. “El gobierno provincial no tiene nada que esconder. Decir que estamos trabando la administración del gobernador es de una absoluta falta de visión política. Es una interpretación traída de los pelos. Los resultados están a la vista: la ley que hemos aprobado tiene que ver con el gran compromiso institucional. ¿Cómo voy a desestabilizar al gobernador cuando ayer le sacamos una ley?”, puntualizó Mariotto, en referencia a la reforma impositiva que fue aprobada en el Senado, pese al intento de irrumpir en la Legislatura provincial por parte de los ruralistas, que encabezó Hugo Biolcati.

Desde la oposición hicieron eje en la polémica y se acordaron del ex presidente Julio Cobos. “Cobos es un canto a la lealtad al lado de Mariotto”, consideró José Scioli, hermano del gobernador y cercano a Francisco de Narváez. “Por mucho menos que a Mario-tto, a Cobos le dijeron traidor, destituyente, de todo, menos bonito”, interpretó la líder del GEN, Margarita Stolbizer, que comparó así un pedido de informes con el voto “no positivo” en la sesión del Senado por las retenciones móviles en pleno conflicto rural de 2008. La diputada opositora consideró que “igual, es más fácil bancar ese serrucho que al salvavidas Boudou”.