En Santiago del Estero una víctima de la represión en la última dictadura, que reconoció un centro clandestino donde se torturó y asesinó a estudiantes secundarios, denunció ayer que recibió amenazas telefónicas y que en la vía pública fue agredida verbalmente por familiares de ex comisarios condenados por delitos de lesa humanidad. La ex presa política Nancy Cordero, de 60 años, denunció que en las últimas horas fue víctima de insultos en la vía pública, proferidos por familiares de ex represores santiagueños. Y dijo que recibió amenazas telefónicas en las que le indicaron que iban a “secuestrar a su hijo”. La semana pasada, la mujer reconoció una finca del ex comisario Francisco “Paco” Laitán, que cumple una condena de prisión perpetua por delitos de lesa humanidad, como el lugar en el que torturaron a estudiantes secundarios y en el que Musa Azar “mató de dos disparos por la espalda al estudiante Guzmán”.