Lunes, 11 de noviembre de 2013 | Hoy
EL PAíS › EL OFICIALISMO GANó EN 20 DE 23 DISTRITOS Y LA IZQUIERDA, EN LA CAPITAL
Salta cerró el calendario electoral del 2013 con un triunfo del oficialismo que encabeza el gobernador Juan Manuel Urtubey, que mantendrá tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados de la provincia los dos tercios de las bancas. Sin embargo, la noticia llamativa de la jornada fue el resultado logrado por el Partido Obrero, que ganó la elección en la capital salteña, en las categorías de diputados y senadores, así como en los comicios para renovar el Concejo Deliberante, donde peleará la primera minoría.
Al término de los comicios realizados mediante el sistema de voto electrónico, Urtubey reconoció la pérdida del senador de la ciudad capital a manos del PO, pero remarcó que de los 23 departamentos que tiene la provincia, los candidatos del oficialismo ganaron en 20. Además de mantener los dos tercios en las dos cámaras. La lectura que hizo el PJ de los resultados de la elección es que el Frente Salteño del ex gobernador Juan Manuel Romero perdió bancas y salió debilitado de los comicios.
De las 30 bancas de diputados provinciales que se pusieron en juego, 20 quedaron en manos de fuerzas aliadas al gobierno de Urtubey, con lo cual el oficialismo provincial y sus socios tendrán 43 legisladores sobre un total de 60. En el Senado se renovaron doce bancas, siete de las cuales quedaron en manos del PJ; de un total de 23 senadores, el oficialismo tendrá ahora 17.
En la capital, que es el principal distrito de la provincia, la candidata a senadora del PO, Gabriela Cerrano, ganó con el 27,13 por ciento de los votos a su principal competidor, Gustavo Sáenz, del Partido Justicialista, que obtuvo el 22,69 por ciento. Cerrano se convertirá así en la primera representante del PO en ocupar una banca en la Cámara alta provincial.
En el rubro de diputados provinciales, en la capital provincial, la ventaja del PO fue mayor, ya que la boleta encabezada por Claudio del Pla recibió el 26,70 de los votos. En segundo lugar quedó Manuel Godoy, del Partido Justicialista, con 17,43 por ciento, mientras que Javier David, del Frente Salteño (de Romero), consiguió el 10,13 por ciento. Finalmente, Carlos Zapata, candidato de Salta Somos Todos (de Alfredo Olmedo) sólo cosechó el 7,45 por ciento.
En la elección de concejales para Salta capital la diferencia fue todavía más marcada, ya que el PO alcanzó el 30 por ciento, seguido del PJ con el 18,95 por ciento. El PO sostiene que obtendrá nueve ediles, aunque desde el PJ aseguran que serán ocho, que quedarían en paridad numérica con los ocho del oficialismo y sus aliados. El líder del PO, Jorge Altamira, festejó el triunfo de su partido y dio su lectura sobre los resultados: “Un nuevo sector muy amplio del peronismo se volcó al Partido Obrero”.
En la provincia se eligieron 12 senadores, 30 diputados, 320 concejales y el intendente de Salvador Mazza, ya que el anterior mandatario, Carlos Villalba, fue destituido bajo la sospecha de estar vinculado a una red de trata de personas (ver aparte).
Durante la jornada se implementó el voto electrónico. Si bien esto ya había sido utilizado parcialmente en las primarias provinciales, fue la primera vez que se usó para todo el padrón provincial.
El sistema tuvo fallas técnicas que provocaron demoras en la votación, pero fueron subsanadas por un equipo de contingencias del Tribunal Electoral. También demoró el proceso el desconocimiento de algunos votantes sobre cómo usar las terminales. Fuentes del Poder Judicial de Salta admitieron que la cantidad de dispositivos con desperfectos técnicos fue sensiblemente superior a la de las primarias provinciales del 6 de octubre pasado. Los voceros aclararon que estos inconvenientes estuvieron dentro de lo previsto por el Tribunal Electoral, que dispuso el reemplazo de las máquinas que se “tildaron” y de las boletas que no se imprimieron.
De todas maneras, las demoras provocaron críticas de dirigentes de la oposición, incluso de algunos que propusieron volver al sistema tradicional. Sin embargo, el gobernador Urtubey defendió el cambio. “La gente ha respondido bien. El sistema independiza muchísimo a la sociedad, así que hay que aprovecharlo e ir aprendiendo. Por ahí no salen un ciento por ciento las cosas como uno quiere, pero de a poco se va a ir mejorando –concluyó el mandatario–. Sigo creyendo que este sistema es mucho más seguro y confiable.”
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