Los docentes bonaerenses nucleados en el gremio Udocba (alineado en la CGT que comanda Hugo Moyano), a los que se sumaron sectores disidentes de Suteba, realizaron ayer un paro en reclamo de mejoras salariales y laborales, una medida que fue calificada desde el gobierno de Daniel Scioli como "irracional, extorsiva y politizada", por lo cual se anunció que se descontará el día no trabajado. Para los gremios organizadores de la medida, la huelga tuvo una adhesión muy importante, mientras que para la administración de la provincia bonaerense la participación de los maestros en el paro fue "baja" en el conurbano y casi nula en el interior de la provincia. De la medida no participaron los sindicatos mayoritarios en territorio bonaerense, agrupados en el Frente Gremial Docente.