[cerrar]

Comparta esta nota con un amigo

E-Mail de su amigo
Su nombre
Su E-Mail

La XXIV Cumbre Iberoamericana aprobó ayer los documentos que apuntaron a la renovación de ese espacio de colaboración para darle un carácter bienal y objetivos más concretos. Los 22 países miembro, en su mayoría representados por sus jefes de Estado, apostaron en Veracruz por favorecer políticas de inclusión social a través de la educación y la cultura y por la innovación como vía para superar las desigualdades sociales.

Después de dos días de trabajos y debates, el cierre del encuentro estuvo dado por la firma de documentos aprobados en la Cumbre, que incluyen la propia Declaración, un Programa de Acción para los dos próximos años y 11 declaraciones especiales sobre diversos temas, incluidos los fondos buitre y Malvinas (ver nota principal). En la clausura, la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, aseguró que la declaración final toca temas “no sólo fundamentales para la región iberoamericana, sino que lo hace de manera mucho más concreta, más directa, dirigida a los resultados que están esperando los ciudadanos”.

Asimismo, la funcionaria costarricense calificó el desarrollo de la cumbre de “todo un éxito” tras definir una “agenda sustantiva” que “es la respuesta para combatir la violencia, la apatía, la desesperanza y el desencanto” para aquellos grupos de población que aún están esperando oportunidades. Por su parte, el anfitrión, el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, celebró la cumbre centrada en temas de “enorme trascendencia” que –según consideró– representan una plataforma importante para impulsar la prosperidad, la inclusión, el combate a la pobreza. El mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, que ayer asumió la secretaría pro témpore y cuyo país albergará la próxima cumbre, en 2016 (será la primera que se celebra con carácter bienal), destacó la disciplina de los dignatarios en la reunión en Veracruz para debatir sobre los temas acordados y prometió trabajar duro para que la próxima sea igual o más exitosa.

En la cumbre de ayer faltaron los presidentes de Argentina, Brasil, Bolivia, Cuba, Nicaragua, El Salvador y Venezuela.