Con el Presupuesto para este año ya aprobado por la Legislatura, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, anunció ayer que en los próximos días convocará a los sindicatos docentes para empezar a discutir salarios. “Comenzaremos la semana que viene las comisiones técnicas paritarias”, precisó Vidal, quien de cara a una negociación que seguramente será dura abrió el paraguas y avisó que los trabajadores deberán “entender la situación que tiene la provincia”. Además de anunciar el llamado a los maestros, la gobernadora celebró la sanción del Presupuesto aún cuando la autorización para endeudar a la provincia es menor a la que pretendía y señaló que “el mensaje es que se puede gobernar en minoría y dialogando”. Desde el Frente para la Victoria destacaron la decisión de ese espacio de acompañar la aprobación en general como “un apoyo a la gobernabilidad” del distrito.

En la administración bonaerense aguardaban la sanción del Presupuesto para llamar a negociar a los gremios docentes. La misma Vidal explicó ayer que “es muy difícil poder discutir una paritaria sin Presupuesto aprobado”, al hacer el anuncio de que “el ministro de Trabajo (Marcelo Villegas) está convocando para empezar a dialogar la semana que viene”.

La intención del gobierno provincial es citar al Frente Gremial Docente para el próximo jueves. A partir de entonces comenzarán los encuentros de comisiones técnicas paritarias, de salud e higiene y de condiciones laborales en las que unos y otros irán tanteando el terreno con vistas a la discusión de fondo que girará en torno a los salarios.

El objetivo de máxima de Vidal es que las clases comiencen sin alteraciones y su premura en convocar a los docentes radica en darse el mayor tiempo de discusión posible habida cuenta de que la negociación no será sencilla. El secretario general del Suteba, Roberto Baradel, dijo hace un par de meses que pedirían un 40 por ciento de aumento. Esta semana evitó fijar un piso para la negociación, aunque advirtió que todas las medidas del gobierno de Mauricio Macri “han sido inflacionarias”.

El sindicato de base de Ctera en la provincia tendrá a fin de mes datos de un estudio propio sobre la pérdida del poder adquisitivo. Ese será el número que llevarán a la mesa paritaria, donde plantearán un pedido de aumento para el primer tramo del año y reabrir la discusión entre mayo y junio.

“Está en nosotros la mejor vocación de que los trabajadores ganen lo mejor posible”, declaró ayer Vidal, aunque dijo también que se debe entender “la situación que tiene la provincia”. La discusión con los docentes quedará en manos del director general de Cultura y Educación bonaerense, Alejandro Finocchiaro, quien condujo las discusiones con los maestros porteños durante el gestión de Macri. En su caso fue aún más directo que Vidal en la búsqueda de acotar las expectativas en torno al aumento salarial: dijo que pondrán “la mejor buena voluntad para hacer la mejor oferta que podamos a los docentes”, pero que “la provincia está devastada”.

Vidal hizo el anuncio de la convocatoria a los docentes durante una conferencia de prensa que ofreció en la Casa Rosada junto al jefe de Gabinete nacional, Marcos Peña, en la que destacó también la sanción del presupuesto. “Es importante no para Cambiemos, sino para cada uno de los vecinos”, enfatizó la gobernadora.

El ministro de Gobierno bonaerense, Federico Salvai, también manifestó su satisfacción por la aprobación del Presupuesto. El funcionario, que tuvo a su cargo la negociación con el peronismo, explicó que “la sanción tiene un doble valor porque integró a todas las bancadas y aún la representación de intendentes”.

El Presupuesto aprobado por la Legislatura incluye un endeudamiento de 60 mil millones de pesos y no de más de 100 mil como pretendía Vidal. De esos 60 mil millones, 10 mil serán para los municipios, que destinarán tres cuartas partes a infraestructura y el resto a seguridad. Un sector del Frente para la Victoria se opuso a convalidar semejante endeudamiento, aunque la totalidad del bloque votó a favor de la aprobación en general del Presupuesto.

“A esos 60 mil millones le faltaba profundización de consistencia en el análisis. Los que votamos en contra entendíamos que aprobar un nivel de endeudamiento de 35 mil millones era absolutamente razonable”, explicó el diputado kirchnerista Avelino Zurro, quien destacó que dieron su aval en general porque “desde el minuto uno” quisieron darle a Vidal el Presupuesto como “instrumento” de gobierno.

Entre los que acompañaron la iniciativa en su totalidad, Fernando “Chino” Navarro destacó la cohesión del bloque en la decisión de no dejar a Vidal sin Presupuesto. Explicó que fue “un apoyo a la gobernabilidad” y añadió que “no podemos poner palos en la rueda porque perjudicamos a los bonaerenses”.