EL PAíS
La Universidad de Córdoba más Locademia que docta
El gremio docente de la universidad y el de prensa piden la renuncia del rector de la UNC. Los cargos incluyen mal manejo y agresiones a periodistas.
Por Camilo Ratti
Desde Córdoba
Reparto de cargos a dedo, familiares en puestos jerárquicos de la universidad, consiliarios que son estudiantes crónicos con pésimos promedios y brutales agresiones a periodistas de Canal 8 son parte de las denuncias que por estos días salpican y ensucian a toda la gestión del reelegido rector de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), el ingeniero Jorge González. Mientras la oposición pide sumarios y juicios académicos al decano de Ciencias Exactas, Juan José Segura, uno de los dos agresores del periodista Damián Carreras, el gremio docente y el de prensa exigen la renuncia de todas las autoridades, incluido González.
“Todos son hechos que nosotros venimos denunciando desde hace dos años y que están en un expediente de 7 hojas que el rector nunca quiso leer y aceptar”, disparó Carolina Scotto, decana de Filosofía y Humanidades y rival de González en las últimas elecciones universitarias.
Pero fue a partir de tres informes que Canal 8 de Córdoba puso en el aire para que la bomba estallara y las denuncias de corrupción y nepotismo de la gestión González salieran de los claustros universitarios y coparan la atención de los medios y la opinión pública cordobesa.
Entre los casos más graves investigados por el periodista Héctor Emanuelle, y que salpican la gestión del rector, se encuentra el de Enrique Cuello y Daniel Ojea, dos consiliarios estudiantiles, y José Montini, actual secretario de deportes de la UNC. Un cargo creado dos meses antes de la Asamblea Universitaria que consagró a González como rector de la UNC hasta el 2007. Un puesto que Montini habría recibido a cambio de los 5 votos que éste manejaba en la Facultad de Ciencias Químicas y que fueron decisivos a favor de González en la elección del 22 de noviembre pasado.
Sin embargo, la historia de Montini en la UNC no se reduce a este hecho. Funcionario en todas las gestiones universitarias desde que ingresó a la facultad, en el año ‘86, tiene aprobado el 60 por ciento de su carrera y su analítico denuncia 38 aplazos, con un promedio de 3,11 puntos. Como secretario de deportes cobra un sueldo de 2700 pesos, además de tener un cargo en la Municipalidad de Córdoba y otro en el Laboratorio de Hemoderivados de la UNC, en los cuales no trabaja por estar de licencia.
Por el lado de los consiliarios, Cuello es estudiante de Farmacia, ingresó a la universidad en 1987 y en sus dieciséis años que lleva como alumno cosechó la friolera de 78 aplazos y alcanza un promedio de 2,69 puntos.
El caso de Ojea no es menos sorprendente. Estudiante crónico desde el ‘87, aprobó su primera materia en 1990, tres años después de haber ingresado, y entre noviembre de 2001 y marzo del 2002 rindió once materias, diez de ellas libres, un record en la historia de la facultad. Además, el 15 de marzo de 2002 aprobó dos materias libres el mismo día, otro record Guinness para una carrera sumamente difícil, y obtuvo un puntaje de diez en Clínica Psiquiátrica, la materia de la cual el decano de esta facultad y padre político de Ojea, Daniel Willington, es el jefe de cátedra.
“Cuello, Ojea y Montini son la síntesis perfecta de la dirigencia estudiantil prebendaria y corrupta que integra la actual administración, que no merecen continuar en la universidad”, apuntó Scotto.
Familiares
El otro punto que despertó la ira del ingeniero González y el séquito de colaboradores que terminó trompeando a cronistas y camarógrafos está relacionado con la decena de familiares y amigos que integran su gestión en puestos clave.
Andrés Rodríguez, yerno de González, es subsecretario de Ciencia y Técnica de la UNC, un área que también maneja grandes presupuestos. Sindicado como el “monje negro” de la Facultad de Ciencias Exactas (desde donde proviene el rector), es una de las personas que suena como candidato para ser decano en las próximas elecciones.
Magdalena Siderides, nuera de González, es la actual jefa de prensa de la universidad, un cargo jerárquico al cual accedió tras una recategorización no docente, ya que ella había ganado un concurso en este claustro, pero en la Facultad de Filosofía y Humanidades. El esposo de ésta e hijo del rector obtuvo un cargo como contratado no docente, también en la Facultad de Ciencias Exactas.
La esposa del secretario de Extensión, Gabriel Pedetta, fue nombrada como médica en Bienestar Estudiantil, un área que depende de la Secretaría de Asuntos Estudiantiles. Aquí también trabaja la hija de Eduardo Cordero, secretario de esta repartición universitaria.
“En estas dos megasecretarías es donde se ubican muchos de los amigos y familiares del poder, porque con las pasantías, la atención médica a los estudiantes y las actividades culturales que organiza la universidad se manejan enormes cantidades de dinero”, denunció Scotto.
Aunque el gremio docente y el de prensa exigen la renuncia de González y todos sus colaboradores, la oposición encabezada por Scotto pide que se sancione a Cuello y Ojea, se expulse a Montini de la secretaría de deportes y se realice un juicio académico a Juan José Segura, el decano de Ciencias Exactas que agredió a los periodistas de Canal 8. “Estos eran los temas que el Consejo Superior tenía que tratar en su última reunión y que no lo hizo. Así que recién en febrero tendremos novedades”, dijo Scotto, quien asegura que “todo esto se acabará cuando se cambie este sistema de elección indirecta y prebendaria por el de voto directo”.