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Desde que se hizo cargo de la situación en Santiago del Estero, el interventor Pablo Lanusse destacó la coincidencia entre la prioridad del gobierno nacional y la principal exigencia de los santiagueños: recuperar el estado de derecho y la división de poderes que habían sido virtualmente anulados por el matrimonio Juárez. Anoche, Lanusse anunció que el camino para alcanzar ese objetivo es una reforma a la Constitución provincial. “Esa es la forma de desterrar todo vestigio autocrático de la actual Constitución que focaliza todo el control del Estado en el Poder Ejecutivo”, explicó el interventor a Página/12.
Junto al asesor de Asuntos Constitucionales, Daniel Sabsay, Lanu- sse ofreció una conferencia en la gobernación, que fue abierta al público y marcó el primer paso en la búsqueda de consensos para introducir modificaciones a la Constitución. “Frente al panorama provincial, nos hemos encontrado en la necesidad de encarar un proceso consensuado hacia la reforma”, señaló Lanusse. “Queremos que haya un Nunca Más –dijo– en la forma de manejar la política que los santiagueños han conocido.”
“Las reformas tendrán que ver con la organización del poder, porque el texto actual desbalancea el peso de los distintos poderes, con un exceso de protagonismo en el Ejecutivo”, explicó Sabsay a Página/12. En el debate encarado para terminar con estas estructuras gestadas durante los últimos 50 años en Santiago participarán además partidos políticos, gremios y ONG, con el apoyo de la Mesa del Diálogo Argentino.
“Hay una efervescencia de la sociedad civil sobre la necesidad de cambios, y no creo que surjan grandes contradicciones a la hora de debatir”, confió Sabsay, quien estimó que “en cuatro meses podría estar sentada una Convención Constituyente”. Según precisaron, las reformas girarán además sobre el actual régimen electoral, la organización del Poder Judicial, el Consejo de la Magistratura y la “retaceada” autonomía municipal. “Hay que dar mayor elasticidad al Poder Legislativo y generar nuevos procesos de control desde la sociedad”, señaló el jurista.
En Santiago del Estero son muchos los que cuestionan la legitimidad de la Constitución, que fue aprobada en la Constituyente de octubre de 2002, cuando el juarismo dominaba a su gusto el escenario político provincial.
Informe: Alfredo Ves Losada.