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“Esta obra que va a hacer el gobierno la tendría que haber hecho la empresa Camuzzi, pero como para ellos no es rentable, entonces los santacruceños tenemos que arreglarnos como podemos para llevarla adelante.” Con esta recriminación a una empresa privatizada, el gobernador de Santa Cruz, Néstor Kirchner firmó ayer el contrato para la construcción, con fondos provinciales, de dos plantas de almacenamiento de gas y una red de distribución para la ciudad de El Chaltén.
Durante el acto donde se firmó el contrato para la construcción de las obras gasíferas, que le costarán al gobierno provincial 1.200.000 pesos, Kirchner aseguró que “todas estas obras están hechas con fondos provinciales, porque en este país los lugares periféricos muchas veces para los gobiernos centrales significan poco, y para las empresas privatizadas, como el caso de Camuzzi, menos”. El gobernador, que viene manteniendo distancia de la gestión Duhalde, también advirtió que “cuando esta región se vuelva rentable por la cantidad de gente que viva acá, por la cantidad de hoteles, y por el movimiento del turismo, las empresas privatizadas estarán detrás del mercado”. Estas declaraciones se producen casi dos semanas después de que las privatizadas Telecom y Metrogás declararan el default de su deuda con acreedores internacionales, luego de intentar que el Estado argentino se hiciera cargo parcialmente de los pasivos.
Durante la ceremonia, donde estuvieron presentes la senadora Cristina Fernández de Kirchner y la diputada nacional Mónica Kuney, también se preadjudicó la construcción de una escuela y un jardín de infantes para El Chaltén. Los nuevos edificios educativos le costarán 1,1 millón de pesos a una provincia que depende en gran parte de los aportes fiscales de las empresas petrolíferas. “A pesar de la situación que nos toca vivir, y que hoy es muy difícil de encarar este tipo de obras, porque por el proceso de devaluación no hay precios claros y concretos, nosotros estamos dispuestos a no bajar los brazos”, afirmó Kirchner antes de firmar el acuerdo.
El jueves, el gobernador santacruceño, que sigue trabajando en su proyecto presidencial, se reunió en la Bolsa de Comercio con un grupo de economistas. En la reunión estuvieron presentes Gustavo Caraballo, Carlos Leyba, Carlos Goldstein, el ex secretario de la Bolsa, Luis Corsiglia, y el dirigente Julio Bárbaro. El objetivo del encuentro fue comenzar a diseñar un plan económico alternativo al que está implementando el gobierno de Eduardo Duhalde.