EL PAíS
Carrera de postas en Izquierda Unida
Vilma Ripoll, del MST, entregó su banca en la Legislatura a Marcos Wolman, del PC, y volverá a trabajar de enfermera.
“Aunque a veces no lo sepamos y dividamos nuestras fuerzas en querellas internas o discusiones estériles, todos somos aliados.” La frase fue escrita en mayo de 1962 por el Che Guevara y ayer se escuchó en Plaza de Mayo durante un acto en el que la Izquierda Unida (IU) ratificó su decisión de conformar un frente político que le permita superar su karma histórico: las divisiones. El acuerdo quedó sellado con el traspaso de la banca que la diputada del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) Vilma Ripoll ocupa en la Legislatura porteña al líder del Partido Comunista de la Capital, Marcos Wolman. La IU lanzó además formalmente las candidaturas de Ripoll y de la diputada nacional Patricia Walsh para las legislativas de octubre de 2005.
Por momentos, la Plaza de Mayo repitió algunas fotos del acto que la izquierda realizó el 1 de Mayo. Ese día también fue sábado y todas las fuerzas de ese arco político celebraron el Día del Trabajador con un encuentro que tuvo un objetivo claro: transmitir una imagen de unidad. Ayer, esa idea quedó reforzada con hechos concretos.
Uno de ellos fue el traspaso de la banca de Ripoll a Wolman, tal como había sido acordado en la alianza electoral entre el MST y el PC. Wolman asumirá formalmente durante la sesión del próximo martes y ocupará la única banca que posee la IU en la Legislatura porteña hasta diciembre de 2005. “Con este acto de relanzamiento, la izquierda está dando una demostración de ser una fuerza seria, responsable y confiable, donde predominan las coincidencias, aun existiendo diferencias”, dijo el dirigente comunista.
Ripoll, por su parte, volverá a transitar desde el miércoles a las siete de la mañana los pasillos del Hospital Italiano con su uniforme de enfermera, tal como hizo durante 20 años antes de ser legisladora. “Muchas veces la izquierda se divide por los cargos, pero nosotros tenemos un compromiso y demostramos que no estamos atados a nuestras bancas”, dijo, mientras miles de papelitos llovían sobre su cabeza. “Y Vilma no se va, y Vilma no se va...”, cantaban los militantes del Teresa Vive, que desplegaron un arsenal pirotécnico.
La salida de Ripoll de la escena política no será definitiva, ni mucho menos. Durante el acto confirmó que encabezará la lista de candidatos a diputados de la IU por la provincia de Buenos Aires en las próximas elecciones legislativas. “Dejo mi banca pero no la pelea”, aclaró. Patricia Walsh, por su parte, será la primera candidata a diputados por la Capital.
Aunque cada frase de cada uno de los oradores subrayó la necesidad de alcanzar un frente político unitario, aún quedan algunos matices por resolver. La semana pasada, durante su XXIII Congreso Nacional en el Hotel Bauen, el PC resolvió avanzar en la construcción de un frente de centroizquierda, que comenzó a gestarse tímidamente en el encuentro que se desarrolló en Rosario a fines de noviembre. Y lo cierto es que en el MST se muestran bastante escépticos respecto de una construcción de ese tipo.
Más allá de estos grises, el mensaje que se escuchó en la plaza sobre la necesidad de fortalecer la alianza de la IU fue compacto. “Este acuerdo no es pragmatismo oportunista, sino un paso firme hacia un frente de liberación nacional y social”, dejó en claro el secretario general del PC, Patricio Echegaray.
También fueron compactas las críticas hacia el gobierno nacional y “sus deseos de pagar una deuda que es inmoral e ilegítima”, y a la “criminalización de la protesta social”. La más dura en ese sentido fue Patricia Walsh, quien exigió al Ejecutivo “una Nochebuena sin presos políticos”. Walsh es además una de las impulsoras del proyecto de “eximición de la pena y desprocesamiento contra los luchadores populares”, que fue ignorado en el Congreso por las bancadas del PJ y la UCR.
Durante el acto la IU transmitió un fuerte respaldo a los reclamos salariales surgidos en varios frentes en los últimos días y destacó la necesidad de fortalecer las nuevas corrientes gremiales que nacieron entre los trabajadores ferroviarios, telefónicos, de subterráneos y de sanidad, en oposición a “las burocracias sindicales de los gordos”.
Informe: Alfredo Ves Losada