EL PAíS
Los directivos de SW, a declarar por otros casos
Dos jefes aduaneros de Córdoba revelaron en un juicio oral que en cinco meses de 2004 detectaron “ocho o nueve” vuelos de SW desde Perú en los que se transportó un total de 50 kilos de cocaína. Los jueces citaron para el lunes al presidente y al gerente general de la empresa.
Los directivos de la empresa aérea Southern Winds (SW) tendrán que dar explicaciones también ante la Justicia cordobesa. En la primera jornada del juicio oral que comenzó ayer en la ciudad mediterránea, dos agentes aduaneros testimoniaron que durante los cinco primeros meses de 2004 hubo “entre ocho y nueve” procedimientos antidroga, en vuelos desde Tacna (Perú) hacia Córdoba, en los cuales fueron decomisados 50 kilos de cocaína. Todo indica que la ruta “turística” que abrió SW hace siete años se transformó en la conexión narco Tacna-Córboba, y va camino a convertirse en el nuevo capítulo del escándalo de las valijas.
El juez en lo penal económico Carlos Liporace ya había anticipado que tenía en la mira a la “pista Tacna”, y ahora sigue con atención el caso cordobés. Incluso, el fiscal Miguel Angel Rizzotti evalúa la posibilidad de pedir la unificación de esta causa con la que investiga Liporace, según fuentes de la agencia Télam.
En la capital provincial comenzó el juicio a los ciudadanos peruanos José Luis Mori Regio, de 24 años, y Harles Matías Ruiz, de 26, quienes el 31 de diciembre de 2003 fueron detenidos en el Aeropuerto Ambrosio Taravella, acusados de portar cuatro valijas negras de marca Airlines en las que había 16 kilos de cocaína. Ayer, en primer término, el agente de Drogas Peligrosas de la Aduana de Córdoba, Santiago Houston, afirmó que por lo menos “cuatro vuelos” de SW arrojaron “resultados positivos”, según publicó La Voz del Interior. El segundo testigo, otro agente aduanero de nombre Edgardo Beretta, indicó que hubo “entre ocho o nueve” viajes de la misma aerolínea en los que se encontró drogas que en el aeropuerto de Tacna no habían sido detectadas.
Beretta precisó que en menos de un año se había decomisado cerca de “50 kilos de cocaína” en los vuelos de SW que partían a las 23 (hora de Perú) y que llegaban a las 4 de la mañana a Córdoba. El agente consideró que los controles eran difíciles de realizar “por el horario”. En tal sentido, el juez José María Pérez Villalobo coincidió en que “tal vez se confiaron en que, al tratarse de un vuelo nocturno, los controles eran más relajados”.
El presidente del tribunal, Octavio Cortez Olmedo, aseguró que, ante las afirmaciones de los testigos decidieron citar para el lunes a “los responsables de SW”, Juan y Christian Maggio.
La droga encontrada a los peruanos en Córdoba estaba oculta en los forros de los sectores laterales de las valijas y fue detectada “por el olor a pegamento” que dijeron haber percibido los agentes aduaneros. Beretta agregó que “oportunamente” informó a sus superiores de Buenos Aires sobre esta situación.
Por su parte, Mori Regio y Ruiz dijeron estar ajenos al tráfico de droga y señalaron ante el tribunal federal, integrado por Cortez Olmedo, José María Pérez Villalobo y José Tribuzzio, que ellos fueron objeto “de un engaño” por parte de la gente que los contactó en Perú. “Yo puse ropa en una de las valijas que me habían dado y no sabía qué había en el interior”, dijo Mori Regio. “El (no precisó quién) me hace pasar en el aeropuerto (de Tacna) y me vine para acá (Córdoba), donde me detuvieron”, agregó.
El propio alcalde de la desértica Tacna, Jacinto Gómez Mamani, reconoció que por el aeropuerto de esa localidad del sur de Perú pasa droga con destino a la Argentina, que luego va a Europa. Aunque aclaró que no la producen allí sino en Huanuco. Al embarque del 31 de diciembre de 2003 le sucedieron otros. En noviembre de 2004 fueron detenidas “mulas” provenientes de Huanuco que llevaban en sus estómagos 9 kilos y medio de cocaína de alta pureza. Estaban a punto de subir al vuelo de SW y viajaban simulando ser un grupo de turistas.
Precisamente, Juan Maggio se jactó de que esa ruta es “muy exitosa”, porque el negocio consiste en llevar turistas desde Tacna a Machu Picchu. Sin embargo, la empresa aclaró que se trata de vuelos charter que realizan con un operador turístico de Córdoba llamado Julio Vargas, que los contrata directamente desde Miami.