El juez federal Sergio Torres solicitará la semana próxima la extradición del represor de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) Ricardo Miguel Cavallo, que está preso en España. El marino reconvertido en empresario fue arrestado en México y llevado a Madrid para ser juzgado a pedido del juez Baltasar Garzón. Pero la Audiencia Nacional de España resolvió el miércoles, a pedido de la defensa, que el represor sea investigado en la Argentina, donde se cometieron sus crímenes. Ayer, la fiscalía española, que había reclamado una pena de más de diez mil años contra Cavallo, apeló esa decisión. Consideró que fue una equivocación “pretender trasladar a los tribunales argentinos un proceso que en España estaba ya prácticamente concluido” y que existe “riesgo de que los crímenes de Cavallo queden impunes”. El abogado Carlos Slepoy, impulsor del proceso en Madrid, también había rechazado la decisión de la Audiencia Nacional por lo avanzado de la investigación (estaba previsto que el juicio oral se realizara en España a principios del año próximo) y porque las condiciones de detención en uno y otro sitio no son las mismas. Actualmente, Cavallo está preso en una cárcel de máxima seguridad y sus compañeros de la ESMA detenidos en la Argentina están en bases navales. Hasta ahora, Torres, a cargo de la causa por los crímenes de la ESMA, no había investigado a Cavallo para que el caso concluyera en España. Pero la Audiencia Nacional dio cuarenta días para que los tribunales argentinos soliciten la extradición. El jueves, el magistrado argentino recibió una copia de la resolución española y giró el caso al fiscal Eduardo Taiano para que opine. La semana próxima reclamará que el represor sea traído a la Argentina.