EL PAíS › JUICIO DE EXTRADICION AL REPRESOR DE LA TRIPLE A

Almirón, atrapado sin salida

El represor, detenido en España, fue trasladado a los tribunales de Valencia donde le informaron que no puede salir de la cárcel ni bajo fianza.

 Por Oscar Guisoni
Desde Valencia

Después de haber pasado la noche en la comisaría del pueblo valenciano de Torrent, donde fue detenido el jueves, el ex subcomisario Rodolfo Almirón declaró ayer ante la Justicia local, que le comunicó la orden de detención librada contra él desde Argentina. El ex miembro de la Triple A llegó al juzgado regional esposado y escoltado por la Policía Nacional. Luego pasó inmediatamente a disposición del Poder Judicial español, en régimen de prisión incondicional por lo que no podrá gozar del beneficio de la excarcelación ni siquiera bajo el pago de una fianza. Según fuentes consultadas por Página/12, Almirón será trasladado a la Audiencia Nacional de Madrid apenas lleguen a España los documentos de la causa emitidos por los tribunales argentinos para dar comienzo así al procedimiento de extradición.

Según cuentan los policías de la comisaría de Torrent, Almirón reaccionó con sorpresa ante su encarcelamiento y proclamó en todo momento que las acusaciones contra él eran falsas y producto del delirio de la prensa. “Yo no he participado en nada de esto –afirmó–. Es mentira que haya cometido todos esos crímenes.” En la Policía Nacional se sorprendieron de que el ex mano derecha de José López Rega no haya intentado la fuga a pesar de que en los medios de comunicación locales circularon versiones acerca de su inminente detención con varios días de anticipación.

Una de las posibles causas de su comportamiento es el precario estado de salud en el que supuestamente se encuentra el ex subcomisario, aunque hay quien apunta en el entorno de la familia que Almirón aún esperaba que sus amigos de antaño en España intercedieran una vez más por él. Página/12 intentó repetidas veces ayer comunicarse con su mujer, Ana María Gil Calvo, pero su celular permaneció la mayor parte del tiempo apagado. En las pocas ocasiones en la que se obtuvo una respuesta, una voz de mujer en francés y con claro acento español respondía con evasivas o cortaba directamente la comunicación.

Días atrás la esposa del represor, que fue durante un tiempo azafata, defendió a su marido ante los periodistas del diario El Mundo que lo descubrieron en Valencia. “Si ellos ponían bombas, nosotros también”, afirmó en ese momento Gil Calvo al periódico madrileño, a la vez que se jactó de los duros métodos que aplicaba Almirón en los tiempos en los que era un policía argentino.

Otro de los motivos por los cuales se especula que el ex subcomisario no intentó fugarse ante su posible detención tiene que ver con la presumible precariedad de su situación económica. Su mujer todavía trabaja (los vecinos dicen que es secretaria en una empresa), pero a él le quedó una miserable pensión luego de haberse jubilado en el sector de la hotelería. Se había visto obligado a trabajar de camarero en Madrid cuando las promesas de sus amigos políticos españoles de que iban a hacerse cargo de su manutención se esfumaron en el olvido.

Los agentes que lo detuvieron relataron al diario valenciano Las Provincias que lo habían encontrado “emocionalmente resignado”, al tiempo que dieron a entender que la Policía Nacional lo tenía bajo constante vigilancia desde que se comenzó a rumorear que regía contra él una orden de captura internacional emitida por Argentina. Cuando Página/12 intentó entrevistarlo en su domicilio de la calle Jesús, número 10, de Torrent, el viernes 21 de diciembre, su mujer llamó a la policía para evitar “el acoso de los periodistas”. Para sorpresa de este medio, no acudieron al llamado los agentes de la policía local, como habría sido lo habitual, sino que hizo su aparición un patrullero del cuerpo nacional, los mismos que ejecutaron el pasado jueves la orden de detención de Interpol.

La Justicia valenciana se limitó ayer a comunicarle su situación de detenido contra el que pesa un pedido de captura internacional, ya que será la Audiencia Nacional de Madrid la que le tome declaración como acusado de crímenes de lesa humanidad cuando se abra el expediente de extradición a nuestro país en la capital española, un trámite que tal vez lleve muchos meses.

Compartir: 

Twitter

Rodolfo Almirón, ex jefe de la Triple A, ante el juzgado de Torrent.
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.