El juicio por calumnias e injurias contra Elisa Carrió, entablado por el empresario Héctor Antonio, entrará hoy en su último tramo, cuando se lean los alegatos de las partes y –posiblemente– se conozca el fallo. Como se sabe, Antonio acusó a la líder de la opositora Coalición Cívica de difamarlo al vincularlo con el crimen de otro empresario.

A las 14, en los tribunales de Avenida de los Inmigrantes 1950, en Retiro, está previsto que el juez correccional Luis Schlegel escuche los alegatos de los abogados de Lilita Carrió, Mariana Stilman y Gerardo Conte Grand, y de Antonio, Jorge Sandro. Después de eso, la propia Carrió podrá volver a expresarse antes de la sentencia. Según fuentes judiciales, la resolución del caso podría conocerse hoy mismo. La pena de calumnia se castiga con multa y hasta tres años de prisión.

Carrió fue acusada de haber vinculado a Héctor Antonio –hijo del fallecido Jorge Antonio, amigo de Perón– con el crimen del empresario pesquero Raúl Espinosa, ocurrido en Puerto Madryn, en 2003. Según Carrió, lo mataron por el interés de otras empresas por hacerse con el control de la compañía de la víctima, llamada San Isidro. Lejos de retractarse, durante el juicio Carrió ratificó sus sospechas e insistió en que dijo “absolutamente la verdad”. Cuando termine el juicio, Carrió deberá enfrentar otras querellas por sus dichos sobre Fernando Alvarez Castellano, presidente de Conarpesa, y sobre el ministro de Planificación, Julio De Vido. También el ministro del Interior, Aníbal Fernández, prometió una denuncia contra la candidata.