El ministro de Salud, Ginés González García, aceptó convertirse en el embajador argentino en Chile a partir del mes que viene, con lo que no asumirá la banca de legislador de la ciudad de Buenos Aires que había obtenido al encabezar la lista del oficialismo en las elecciones de junio pasado. La de Ginés es la primera designación de un embajador político del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner que se oficializa, pero se sabe que el pase de Héctor Timerman del consulado en Nueva York a la embajada en Washington es un hecho, mientras que los nombramientos de Felipe Solá y de Rafael Bielsa en Francia y Alemania se definirán por sí o por no en las próximas horas.

Ginés recibió el ofrecimiento ayer y rápidamente dijo que sí. Hubo una confusión en cuanto a quién le hizo la propuesta, porque las primeras versiones aseguraron que había partido del presidente Néstor Kirchner, pero anoche en la Casa Rosada aclaraban que había corrido por cuenta de la presidenta electa.

El ministro de Salud había aceptado encabezar la lista de legisladores en las elecciones porteñas como una manera de ponerle el hombro a la campaña de Daniel Filmus, que se sabía que la tenía muy difícil contra Mauricio Macri. Sin embargo, una vez electo, Ginés nunca se mostró muy entusiasmado con ocupar un escaño en la Legislatura de la ciudad.

Luego, el anuncio del nuevo gabinete donde su cartera será ocupada por la titular del PAMI, Graciela Ocaña, lo dejó sin ministerio, por lo que la embajada se le debe haber aparecido como una buena salida. Durante el gobierno de Kirchner, la embajada en Chile la ocupó el peronista mendocino Carlos Abihaggle. En el reciente viaje para participar de la Cumbre Iberoamericana, Kirchner inauguró en su residencia –monumento histórico del centro de Santiago– una plaqueta que recordó que allí se había dado asilo a chilenos perseguidos luego del golpe a Salvador Allende.

Con la renuncia de Ginés a la banca, asumirá en la Legislatura el nieto recuperado Juan Cabandié, que iba como cuarto candidato en la boleta del Frente para la Victoria.

La de Ginés no es la única designación que se está resolviendo por estas horas en la Casa Rosada. El nombramiento de Timerman como embajador en Estados Unidos, que varias veces había sido barajado como el reemplazo lógico de José Octavio Bordón, ya es un hecho.

En tanto, continúa sin cerrarse la designación de Solá y de Bielsa como representantes argentinos en París y Berlín. Ambos pusieron peros a la posibilidad de mudarse, por lo que su situación se resolvería en las próximas horas.