Los familiares de los soldados caídos en la guerra de las islas Malvinas están a la espera de que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner responda al pedido de audiencia que hicieron a principio de mes. Es para solicitarle ayuda económica para viajar al archipiélago e inaugurar un monumento en homenaje a los soldados. El gobierno inglés dio gestos positivos para que se concrete el viaje, hecho que la Cancillería argentina interpretó como “positivo” para lograr que los familiares se trasladen.

“Aspiramos a que este año podamos lograr ese sueño porque el 8 de abril se van a cumplir cuatro años de que el monumento está, sin inaugurarse, y sería un acto conjunto, con familiares de caídos británicos y veteranos de guerra de la Argentina continental y del Reino Unido”, aseguró ayer Héctor Cisneros, presidente de la Comisión de Familiares de los Caídos en Malvinas. “Lo único que nos falta –agregó Cisneros– es obtener los recursos y por eso estamos pidiendo una entrevista a la señora presidenta para conversar sobre este tema.”

Hace dos semanas el premier británico, Gordon Brown, se expresó a favor de que los habitantes isleños facilitaran el acceso de los familiares. El punto de desacuerdo está en la forma del traslado, ya que los vuelos charter extra están suspendidos desde el 2001. El viaje que están organizando estaría comprendido por un contingente de 640 familiares, además de veteranos y coordinadores del evento. En total sumarían 800 personas que irían en barco y el costo total sería de 4 millones de dólares de un viaje que duraría ocho días.

Sobre la marcha de las tratativas oficiales, el director general de Malvinas y Atlántico Sur de la Cancillería, Eduardo Airaldi, afirmó ayer que “en lo que se refiere específicamente a la visita de los familiares argentinos al cementerio de Darwin, el mensaje del primer ministro Gordon Brown resulta positivo”. A su vez, calificó los dichos de Brown como “una señal de apertura frente a la negativa demostrada hasta ahora por el Reino Unido para facilitar la visita de los familiares, insistiendo en que se realice en buque, desconociendo los numerosos inconvenientes que ello implica”.