El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, confirmó ayer que si no le traspasan la policía con sus respectivos recursos va a comenzar “el largo camino” de crear su propia fuerza policial. De todas maneras, antes de cerrar del todo las puertas de la negociación aclaró que piensa “agotar la discusión” sobre el tema en la próxima reunión con el jefe de Gabinete, Alberto Fernández y recién después comenzaría el “costoso, no muy entendible” proyecto. Del otro lado, el argumento del gobierno nacional sigue siendo el rechazo del resto de las provincias a “regalarle” los fondos a la ciudad.

La idea de Macri es conseguir un acuerdo para que se cumpla, según su visión, con “lo que dice la Constitución: traspaso con recursos”. Sin embargo, Fernández le dijo a este diario que eso no se va a poder hacer “si no hay una ley que lo autorice”. El jefe de Gabinete insistió con la hipótesis de conflicto entre las provincias y la ciudad: “Hay una realidad fáctica que es que las provincias no le van a regalar mil millones de pesos a la ciudad que está en mejores condiciones”, aseguró.

En los primeros días de marzo, Macri volverá a encontrarse con Fernández pero ya no para hablar de trabajo conjunto entre los gobiernos sino con el objetivo puntual de reclamar, nuevamente, por la policía. Los dos funcionarios aseguraron que en la reunión que mantuvieron esta semana no se tocó ese tema. “La primera fue un punto de partida, en el cual se habló de transporte, educación, de infraestructura en general. Se generaron líneas de trabajo, y esperamos que en los próximos días se vayan moviendo las cosas”, relató el mandatario porteño.

Las dificultades existentes se deben a una “falta de voluntad del gobierno nacional” responden desde el macrismo cuando escuchan las justificaciones de los funcionarios del Estado nacional. Al ser consultado por este diario, el jefe del Bloque de diputados de PRO, Federico Pinedo, afirmó que el tema “no lo tiene que tratar el Congreso porque ya lo trató cuando modificó la Ley Cafiero”. “En esa ley se le permite al jefe de Gobierno crear su propia policía. La que tiene que hacer algo ahora es la Presidenta, hay que discutir cómo se implementa lo que dice la ley”, explicó Pinedo.

Lo cierto es que con la modificación lo que sucedió fue que se levantó la prohibición que tenía la ciudad para tener una fuerza de seguridad propia. Por eso el jefe de Gabinete no pone ningún reparo cuando Macri dice que va a crear un nuevo cuerpo. “Si él quiere crear una policía propia puede hacerlo”, afirma. Para Pinedo, “es una irresponsabilidad que haya dos policías con las mismas facultades en un mismo distrito”. En ese caso, los efectivos de las 52 comisarías porteñas que tiene la policía federal deberían convivir con sus pares porteños. “Cuando terminemos, ¿qué va a hacer la policía que está ahora, si no llegamos a un acuerdo?”, se preguntó Macri, que por eso calificó su propio proyecto como “no muy entendible”.

Página/12 le preguntó a Pinedo si con los fondos para su policía no se podrían cubrir los gastos de un traspaso sin recursos como plantea el gobierno nacional pero la respuesta fue terminante: “Nosotros no vamos a pagar lo que la Constitución no dice que tenemos que pagar”. Analizando la posibilidad de que no se concrete un acuerdo, en PRO dicen que la porteña “va a ser una policía chiquita, que seguramente no va a alcanzar para dar la seguridad que necesita la gente”.