“El Gobierno trabaja sobre un proyecto integral, que incluye tanto la lucha contra el narcotráfico como la no criminalización del adicto”, aseguró Aníbal Fernández, ministro de Justicia de la Nación, en la apertura de la VI Conferencia Nacional sobre Políticas de Drogas organizada por la Asociación Civil Intercambios.

Según precisó Fernández, “el proyecto en el que trabajamos se apoya en tres patas: una fuerte política de represión de las organizaciones que se dedican al narcotráfico, una fuerte política de prevención y una fuerte política de tratamiento y reducción de daños para los adictos, que procure no criminalizarlos ni parangonarlos con los traficantes”. “Hay que manejar con cuidado el término ‘despenalización’, porque algunos, con mala intención, lo utilizan como sinónimo de una ‘liberalización’ a la que no adhiero”, puntualizó Fernández.

Graciela Touzé, presidenta de la Asociación Intercambios, advirtió por su parte respecto de “la confusión tan frecuente entre los detractores de la despenalización, que la igualan con la legalización de las drogas y que de ese modo fomentan el terror social, cuando se trata en cambio de mejorar la situación de exclusión y estigma que sufren muchos usuarios de drogas”.