El Gobierno y las asociaciones de bancos salieron a repudiar públicamente la toma del Nuevo Banco de Entre Ríos en la localidad entrerriana de Hasenkamp. Esa medida de fuerza encabezada por Alfredo De Angeli, un día antes de que las cámaras agropecuarias se reúnan con el Gobierno, fue calificada como un hecho lamentable, violento y autoritario. Desde las entidades que agrupan a los bancos llamaron a utilizar los canales institucionales de diálogo. La toma finalizó ayer y el titular de Federación Agraria de esa provincia volvió a justificar esa acción diciendo que el banco no había cumplido con la promesa de mantener las tasas de interés.

La Asociación de Bancos Públicos y Privados de la República Argentina (Abapra) repudió la toma “en forma violenta y autoritaria por productores agropecuarios” de la sucursal del Nuevo Banco de Entre Ríos. La cámara sectorial que preside la titular del Banco Nación, Mercedes Marcó del Pont, calificó el hecho encabezado por De Angeli como “una acción que sólo contribuye a profundizar los problemas existentes, comprometiendo la paz social”. A su vez, instó a “todos los sectores del quehacer económico y productivo nacional, una vez más, a buscar alternativas de diálogo que transiten carriles institucionales” y remarcó que el diálogo “es la única manera de afrontar con seriedad y éxito los distintos problemas que la realidad nos impone”.

El Gobierno tampoco se quedó callado. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner advirtió durante un acto en la residencia de Olivos que el camino para reclamar “no es enfrentando con violencia, ocupando rutas o tomando bancos en un momento tan difícil de la economía”. A su vez, la mandataria criticó el cese de comercialización de granos y alertó que “se va a terminar perjudicando al país no por la crisis de afuera, sino por los errores de algunos de adentro”. El ministro del Interior, Florencio Randazzo, cuestionó el nuevo lockout que realizó el sector agropecuario y calificó la toma del banco como “una muestra más de intolerancia antidemocrática”. Antes del encuentro de las entidades agropecuarias y la ministra de Producción, Débora Giorgi, el funcionario advirtió que la acción encabezada por el federado de Entre Ríos “no contribuye absolutamente para nada” en la reapertura del diálogo.

Por su parte, la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), que agrupa a los bancos de capital extranjero, en sintonía con Abapra, remarcó ayer que el diálogo “es el único camino posible para resolver los conflictos sectoriales”. La entidad que preside Mario Vicens señaló que “ABA hace votos para que esta nueva instancia signifique la superación de un conflicto que afecta no sólo a un sector, sino a la economía del país en su conjunto”.

El titular de la Federación Agraria de Entre Ríos, Alfredo De Angeli, volvió a justificar ayer la toma de la sucursal del banco en la localidad de Hasenkamp, al sostener que la entidad “no cumplió con la promesa” de evitar la suba de las tasas de interés de créditos tomados por productores. “A los créditos con intereses del 12 por ciento se los pasan al 36 por ciento, se la debitan directamente de la cuenta corriente y le hacen al productor que está en emergencia un problema financiero tremendo”, sostuvo el dirigente agropecuario. Ayer por la tarde los productores rurales que ocupaban el banco se fueron. El gerente de Asuntos Legales del Banco levantó una denuncia a los ruralistas por el delito de usurpación.