El misterio duró toda la jornada. Néstor Kirchner y Daniel Scioli encabezaron ayer un acto del PJ bonaerense en Hurlingham. Cuando ambos aparecieron, entre la dirigencia bonaerense circulaban versiones sobre una eventual candidatura de Scioli a primer diputado nacional (ver aparte). En su discurso, Scioli pareció ratificar la postulación de Kirchner. “Néstor, necesitamos más que nunca de tu experiencia. Que nos orientes”, pidió desde el micrófono. Kirchner le contestó poco después. “Nadie tiene más experiencia que vos en la provincia”, respondió el jefe del PJ. Más allá del sugestivo intercambio de elogios, lo cierto es que anoche Kirchner volvió a hacer un discurso de campaña. El santacruceño eligió como adversario a Francisco de Narváez y pidió a los votantes tener memoria para defender el modelo. Anoche, según pudo saber Página/12, en La Plata comenzaron a verse los primeros carteles que se usarán en la campaña kirchnerista. Los afiches dicen “Kirchner-Scioli, mi voto es positivo”.

Acompañado por Scioli y el vice Alberto Balestrini, con un palco VIP de intendentes, Kirchner volvió a criticar al bloque de la UCR y la Coalición Cívica. Los principales cuestionamientos fueron, sin embargo, para “la derecha neoliberal”, como llamó a la alianza entre el peronismo disidente y el PRO. Kirchner apuntó sobre todo a De Narváez y a Solá. “Un empresario que dice tener mucha plata quiere comprar la conciencia de los argentinos con dinero. Podrá tener mucha plata pero nunca podrá tener el consenso de los sectores populares”, dijo sobre De Narváez. Hace dos días, el empresario mediático se había jactado de “gastar mucha plata” en la campaña. A Solá, Kirchner lo bautizó como “alguien que desertó de nuestras filas”. El titular del PJ también exhortó a no usar políticamente la problemática de la seguridad. “No se puede buscar un voto en base al dolor de otro”, aseguró. Como en los últimos tiempos, Kirchner dijo que el 28 de junio habrá una puja entre dos modelos, el de la distribución del ingreso, versus la derecha.