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“Es un hecho histórico en el que el Estado avanza en reconocer una igualdad jurídica indispensable para alcanzar la igualdad social”, evaluaba la jornada de ayer María Rachid, presidenta de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans. “Esperamos una pronta aprobación de una ley de muchos años de trabajo por la igualdad y construcción de una sociedad mejor”, sostenía.

–De aprobarse en Diputados, ¿qué estrategia diseñarán para el debate en el Senado?

–Esperamos una media sanción fortalecida y el fallo de la Corte Suprema sobre la inconstitucionalidad o no del matrimonio entre personas del mismo sexo para llegar al Senado con pocas alternativas más que la de la aprobación de una ley que reconozca la igualdad de todos los ciudadanos y ciudadanas.

–En la Iglesia hubo declaraciones y presiones en contra, pero fueron aisladas. ¿Cómo lo evalúa?

–La Iglesia está compuesta por todos los fieles y si la mayoría de los argentinos está a favor de este avance quiere decir que la Iglesia está a favor. La que se opone es la jerarquía de la Iglesia, que también se opone al aborto y al uso de preservativos. Son esas diferencias internas con los fieles las que no permitieron que salgan con fuerza a oponerse.

–Incluso varios legisladores que se oponían a la ley revieron su postura.

–Quienes hasta hace muy poco no reconocían ni la unión civil quedaron tan expuestos en su injusticia ante la sociedad que se ven obligados a inventar alternativas para no impedir el acceso a la igualdad jurídica. Son minoría los que votan en contra y piden la palabra en el recinto. Es que ya da vergüenza oponerse ante los derechos humanos de una parte de la población.

–¿Cómo evalúa el fuerte apoyo de los bloques?

–Temíamos que los enfrentamientos políticos cobraran mayor relevancia que la voluntad de sacar esta ley, pero finalmente pudo más el avance sobre los derechos humanos e hizo que hoy (por ayer) todos dieran quórum y la mayoría de los bloques se pronunciaran a favor.

Entrevista: N. L.