EL PAíS
Bienes culturales
La Cámara de Diputados aprobó anoche la ley de Bienes Culturales, que limita la participación del capital extranjero en las empresas del sector cultural, incluyendo los medios de comunicación y los sitios de Internet. El proyecto, pendiente desde el 8 de mayo, deberá ser tratado nuevamente por el Senado, ya que la Cámara baja modificó un artículo.
El objetivo de la norma es preservar la propiedad nacional de los medios, para lo cual restringe la participación extranjera en las empresas culturales y medios de comunicación a un 30 por ciento del capital accionario, además de limitar los votos de sus accionistas al 30 por ciento.
Como excepción, la ley permite ampliar la participación accionaria en reciprocidad con los países que contemplan inversiones extranjeras en sus medios de comunicación. La norma incluye a la prensa gráfica, los medios electrónicos, las productoras de contenidos audiovisuales y digitales, las proveedoras de acceso a Internet y las empresas de difusión en vía pública.
No fue fácil, ya que el radicalismo recién aceptó tratar la norma luego de negociar con el jefe del bloque del justicialismo, José María Díaz Bancalari, algunas modificaciones elaboradas por Pascual Capelleri, que apuntaron a focalizar más la protección que recibirán las empresas.