El PRO comienza la nueva etapa de la campaña con la idea de apuntalar la candidatura de Mauricio Macri a presidente en 2015. Con el resultado electoral que posicionó a Massa, el jefe de Gobierno debió acelerar los tiempos. Sus candidatos porteños seguirán esta línea, que tendrá los componentes clásicos de anuncios de gestión porteña y proximidad con los vecinos, pero sumará tintes más nacionales. La candidata a senadora del PRO Gabriela Michetti indicó a Página/12: “Mauricio ha sido muy claro, él quiere ser el presidente de la nueva etapa que debe enfrentar el país. El peronismo y el radicalismo ya le han dado a la Argentina lo que podían darle”. El paso lógico será instalar que lo que viene ahora es el PRO.

Los macristas suelen definir sus campañas con dos palabras: gestión y cercanía. Esa fue la estrategia en la campaña de las PASO: inaugurar obras como el metrobus de la 9 de Julio y las estaciones de subte de la línea B, por un lado. Por el otro, se instalaron las habituales mesas con globos amarillos e hicieron recorridas y timbreos. Un mecanismo de centralización de la relación con los medios acompaña esa estrategia. Los timbreos y las recorridas suelen ser con poca gente y la prensa por lo general no es convocada o es avisada con poca anticipación, para evitar preguntas que se alejen del eje discursivo que buscan mantener los macristas. De la misma forma, las entrevistas a los principales candidatos deben pasar por el tamiz del comité de campaña que integran el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta; el secretario general Marcos Peña y el secretario de Medios, Miguel de Godoy. Para esta segunda etapa, los candidatos que integran las listas del PRO recibieron la orden de no ir a ningún debate que no sea autorizado por este comité de campaña. Todo detalle está rigurosamente controlado.

Michetti y Sergio Bergman participarán del debate que propuso la señal de cable Todo Noticias, del Grupo Clarín. Por fuera de esto, no parecen buscar una confrontación con Unen explícitamente, sino que seguirán la estrategia macrista de no responder a los adversarios. “El PRO no entiende la competencia como la destrucción del adversario para quedarse sólo en la cancha y ganar de esa manera”, indicó Michetti a este diario. “Respetamos a los candidatos de otras fuerzas políticas, pero nuestro mensaje siempre está pensado para la gente. Competimos contra nosotros mismos. Queremos llevar la mejor propuesta a la sociedad, superándonos siempre”, indicó.

Esto no quiere decir que no busquen marcar las diferencias, como ya hizo Macri con respecto a Elisa Carrió, a la que tildó de “destructiva”. O el propio Federico Pinedo, quien dijo que “Unen es extremadamente enemigo de Macri”. “Toda la gente que cree que es un buen gobierno va a elegir a los de Macri para que lo apoyen y no a los del Frente para la Victoria y Unen para que lo ataquen”, indicó el jefe del bloque macrista en la Cámara baja. “A diferencia de la campaña de las PASO, ahora vamos a tener un discurso menos ligado a la gestión y vamos a plantear que somos una alternativa en 2015 al peronismo y al radicalismo. No vamos a nacionalizar la campaña de la Ciudad, pero sí va a haber más temas de política nacional”, indicó uno de los estrategas del PRO. Michetti confirma esa estrategia con sus declaraciones a este diario: “Ahora, después de treinta años de democracia ininterrumpida, debemos construir una alternativa distinta, que tome lo mejor de los partidos tradicionales, pero que sume todo aquello que estos tiempos requieren para que la política logre su verdadero objetivo: que la gente pueda vivir siempre un poco mejor”.