El presidente del Tribunal Oral Federal de Formosa, Manuel Moreira, que lleva la causa por delitos de lesa humanidad cometidos en la provincia durante la última dictadura cívico-militar, reconoció ayer en una visita a la sede de Prefectura y la Alcaidía de Varones de la capital provincial su funcionamiento como centros clandestinos. Acompañado de testigos, querellantes y Marta Mayo, detenida en la sede de Prefectura en 1977, reconocieron las celdas y recordaron a “los jefes” de esa repartición. Más tarde, los abogados querellantes Pedro Velázquez Ibarra y Williams Dardo Caraballo indicaron la dependencia donde operaba la Comunidad Informativa Formosa (Comifor). Allí “los jefes de inteligencia y sus colaboradores de las fuerzas de seguridad con sus pares del Ejército decidían la vida o la muerte de las personas”, explicó Velázquez Ibarra.