EL PAíS
Los tiempos serán largos
A pesar de que el Gobierno pretende que la acusación a Eduardo Moliné O’Connor tenga trámite rápido, lo cierto es que el “Reglamento del Honorable Senado constituido en tribunal para el caso de juicio político” tiene una serie de requisitos que puede demorar algunos meses la definición del tema. El procedimiento cuenta con 29 artículos. El primero establece las modalidades para la presidencia del tribunal y los juramentos de rigor. En este caso, el tribunal sería presidido por el presidente del Senado. Una vez constituido, se le comunicará a Diputados que el titular del tribunal “está dispuesto para recibir la acusación”. En el artículo tercero se sostiene que se acordará fecha para la lectura pública de la acusación. Luego de oída, “se dará traslado al acusado para que la conteste en el término de 15 días”. Pruebas, escritos y testigos se ofrecerán en la Comisión de Juicio Político, en este caso la de Asuntos Constitucionales, que preside la santacruceña Cristina Fernández de Kirchner. Puede abrirse un nuevo período de prueba por 30 días. “El procedimiento de prueba se desarrollará en audiencias públicas diarias hasta su terminación”, dice el reglamento. Vencido el período, el presidente designará el día para los alegatos. El tribunal definirá si son ciertos los cargos que se le imputan al acusado y recién allí el tema será llevado al recinto para su votación.