Los medios chilenos lo repiten como si todavía les costara creerlo. Pero sí, finalmente será hoy el día en que una mujer, socialista, agnóstica, madre soltera y víctima de la dictadura pinochetista jurará como la primera presidenta de Chile. Michelle Bachelet asumirá en una ceremonia con toda la pompa que se hará en el Parlamento nacional, ubicado en la localidad de Valparaíso, a poco más de 100 kilómetros de Santiago. Hasta allí se trasladarán los casi mil invitados al evento, en medio de un gigantesco operativo de seguridad que tiñe las calles del color caqui de los carabineros. Bachelet confirmó que su primera salida como presidenta será a la Argentina, adonde estará el próximo 21 y 22 de marzo.

Los diplomáticos argentinos no se cansaban de resaltar la simbología que implicaba que Bachelet debute volando a Buenos Aires. “Es un gesto muy importante”, explicaban. No obstante, es sabido que la inminente presidenta no piensa llevar la intensificación de esas relaciones al nivel de pedir la incorporación de Chile como miembro pleno del Mercosur, al estilo de la Venezuela de Hugo Chávez. “Ellos tienen una economía pequeña y abierta. Tienen firmados tratados de libre comercio con países importantes como Estados Unidos, China, México y Canadá, y otros en carpeta como India. En ese marco, también planean acercarse al Mercosur y eso está muy bien”, evaluaba un diplomático argentino que sigue de cerca la evolución de la relación con Chile.

Luego de colocarse la banda presidencial, la presidenta pasará revista a las tropas formadas en el exterior y luego se trasladará hasta el vecino balneario de Viña del Mar, donde ofrecerá un almuerzo a los invitados especiales. Entre ellos habrá uno muy especial.

Bachelet quiso que estuviera presente el ex general Sergio Poblete, viejo camarada y amigo de su padre, Alberto Bachelet. Ambos se opusieron al golpe de Pinochet, lo que les valió la cárcel y la tortura. Poblete pudo salir de la cárcel en 1975 y se fue al exilio en Europa. Allí fundó la Organización de las Fuerzas Armadas Chilenas Democráticas y, según se dice, cooperó activamente en el guión de la película Missing, de Costa Gavras. Hoy, luego de treinta años viviendo en Bélgica, el ex general Poblete podrá ser testigo de cómo la hija de su antiguo amigo se convierte en la primera mujer en la historia en llegar al Palacio de la Moneda.