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Los bienes del Estado argentino en Italia corren peligro. La Justicia romana autorizó sus “secuestros conservativos” (embargos) al admitir una denuncia presentada por ahorristas italianos que invirtieron en títulos públicos, que ahora están en situación de default. La medida afectaría a propiedades del Gobierno y fondos destinados a Argentina que se encuentran todavía en poder de las autoridades italianas.
La decisión judicial se tomó en respuesta a la presentación de 10 instituciones acreedoras que integran el “Comité de Ahorristas en la Argentina” y que reclaman unos 1.700 millones de euros. Según sostuvo el presidente de ese comité, Mauricio Sandri, el total de las inversiones de los 350 mil acreedores en Argentina “es de 5 o 6 mil millones de euros”. La agrupación también acusó a los bancos italianos de ser responsables de su situación, ya que no informaron suficientemente a sus clientes sobre la situación económica argentina a la hora de invertir.
El diario romano Il Messaggero, detalló que el embargo incluye los bienes inmuebles del Estado argentino y algunos millones de dólares destinados al país en DEG (derechos especiales de giro), la divisa utilizada por el Fondo Monetario Internacional (FMI). “El juez autorizó el secuestro cautelar de los bienes móviles e inmóviles argentinos en Italia, pero la acción legal se extiende a los bienes en el exterior”, aclaró Sandri, refiriéndose a los países de la UE “cuyos intereses entran en la esfera italiana”.
El comité notificó la decisión a la embajada y al consulado argentinos, que rechazaron el recurso, negándose a recibirlo, dijo Sandri, quien definió al Estado argentino como “contumaz” (rebelde). El embajador italiano en Argentina, Roberto Nigido, sostuvo que quiere conocer los términos de la medida antes de tomar cualquier decisión formal. “Me imagino que nos tendremos que ocupar, pero antes tenemos que conocer los términos, su eficacia y saber si es definitiva o no”, dijo. “No tenemos informaciones, no nos ha llegado copia del juzgado sobre la disposición. Estamos examinando el caso y recogiendo datos”, declaró Jorge Illeva, consejero económico de la embajada argentina sobre la noticia que fue publicada a seis columnas y en primera página por la prensa romana.
El número de inversionistas privados que han adquirido títulos del Estado argentino en Italia se sitúa entre 200.000 y 500.000. La mayoría de son jubilados, empleados y dirigentes de empresas, que han desembolsado un promedio de 60 millones de liras (31.000 euros o dólares) por persona en bonos argentinos.