En la recta final de la campaña, Cristina Kirchner concedió ayer reportajes a las radios La Red y Cadena 3 de Córdoba, y los canales de televisión América y TN. La candidata a presidenta del oficialismo habló de la inflación, las papeleras, la relación con los medios y las denuncias de corrupción, entre tantos otros temas. Los siguientes son los tramos más destacados de las entrevistas.

- Inflación: Aseguró que la inflación real “es la que figura en el Indec” y en defensa de ese número dijo que un relevamiento del Banco Central sobre las expectativas de mercado estima un 8,5 por ciento para este año y un 10,6 para los próximos doce meses. La senadora hasta recurrió a un cálculo del Fondo Monetario. “El FMI, no yo, se ha pronunciado que para el año que viene va a haber una inflación del 12 por ciento”, dijo. “Los últimos dos procesos de hiperinflación se registraron con tasas de crecimiento negativo e industrias cerradas”, remarcó luego, dando a entender que ni siquiera el actual contexto ayuda a conformar esa hipótesis. “Ni las condiciones macroeconómicas, ni políticas” en el país indican que puede haber en el futuro gobierno un “peligro” de “desborde inflacionario”. Fustigó así a “los monetaristas” que advierten que hay que enfriar el consumo para evitar una espiral inflacionaria en el país, y dijo que “los que plantean que el modelo de industrialización genera inflación no vivieron en la Argentina”.

- Economía: Consideró que la economía marcha sobre rieles. A modo de ejemplo puso las muchas páginas de avisos de electrodomésticos que publica el diario Clarín los días sábados. “Los avisos contrastan con las noticias del mismo diario”, lo mismo la necesidad que tiene la clase media de hacer reservas para poder cenar en un restaurante ya que los lugares suelen estar llenos.

- Impuesto al cheque: La candidata también relativizó la posibilidad de eliminar el denominado impuesto al cheque y dijo que para sustituirlo “debería asegurarse el nivel recaudatorio”.

- Indec: Dijo que se está estudiando un cambio de medición y que con ese propósito “viajó gente del Indec a Estados Unidos para copiar el modelo de IPC a Estados Unidos”. Defendió los relevos de funcionarios del organismo al asegurar que “contrariamente al relato mediático” ninguno de los desplazados había llegado por concurso y que los que tomaron sus lugares eran personas con más de 30 años trabajando en la materia”. No explicó, aunque le preguntaron, por qué Cobos niega las cifras de inflación que el Indec midió en la provincia.

- Papeleras: Señaló que el conflicto entre la Argentina y Uruguay por la instalación de la pastera Botnia en Fray Bentos “se va a definir en la Corte de La Haya” y destacó que “lo importante es que se ha reinstalado el diálogo entre la Argentina y Uruguay, porque no era bueno que dos entrañables vecinos estuvieran en esa situación”.

- Corrupción: La candidata defendió la actitud del Gobierno frente a denuncias de supuesta corrupción en los casos Skanska, la bolsa de Felisa Miceli y los valijas de Antonini Wilson. “Hubo muestras demasiado claras de cómo se ha reaccionado no cubriendo ningún funcionario, sino separando aquel funcionario aun sin estar procesado o acusado para que la Justicia actuara”, respondió. “Antes tenían que tener prisión de reclusión perpetua” para ser apartados de su cargo.

- Medios: Dijo observar “comportamientos de pérdida de objetividad” de los medios y calificó a los periodistas de “autorreferenciales”, que se quejan cuando no los saluda y le arman el título “mi saludo a la prensa” cuando, precisamente, los saluda. No obstante ello –dijo– “no cargo toda la romana a la prensa”. Insinuó un nuevo trato con los medios pero marcó sus diferencia con la Alianza. “La construcción mediática no es el eje de la construcción política. Concebirme como una dirigente política que está todo el día hablando por radio y televisión no... Realmente, considero que es otro el rol que debe tener la política”. También endilgó a los medios la idea de que dependerá de su esposo a la hora de tomar decisiones. “Es una fantasía, una construcción mediática”.

- Poder Judicial: No descartó promover nuevos cambios en el ámbito judicial, elogió la nueva Corte surgida con su marido y consideró que la misma se tiene que convertir “en la verdadera cabeza del poder”

- Acuerdo social: Dijo haber salido convencida, luego de su participación de la cumbre anual de la OIT, de “la necesidad de sindicatos fuertes y centrales empresarias fuertes”. A los políticos no le gusta” que crezcan otros poderes, “pero no se puede crecer sin un acuerdo fuerte sin empresas y trabajadores fuertes. La puja por la distribución del ingreso es natural”. Es necesario el acuerdo social porque –dijo– a partir del 25 de mayo de 2003 “se volvió a instalar en la Argentina la industrialización” y “esto tiene que ver con este modelo de acumulación y crecimiento que pusimos en marcha”.

- Empresas: Cuestionó a las empresas de energía que no invirtieron y recordó cómo el establishment trabajó para horadar la confianza. En ese sentido trajo a la memoria aquella nota del diario La Nación, al principio de la actual gestión, que le pronosticaba al gobierno de Néstor Kirchner una duración de no más de seis meses. “No creyeron que íbamos a seguir creciendo” y fue el Estado el que tuvo que hacer las inversiones necesarias en energía”.

- Inseguridad: Respecto del problema de la inseguridad, que se transformó en uno de los ejes de la campaña, Cristina respondió por primera vez cómo piensa enfrentarla: “Planes sociales, educativos, sanitarios y de justicia”.