El gabinete “de lujo” de Mauricio Macri acaba de sumar a otro funcionario con frases polémicas sobre los crímenes de lesa humanidad. El primero fue el titular de la Agencia de Control Comunal, Federico Young, quien compartió más de un seminario con la activista pro represores Cecilia Pando. El segundo es el futuro subsecretario de Derechos Humanos, Helio Rebot. “Por supuesto que el terrorismo de Estado cometió crímenes de lesa humanidad, pero todos los crímenes tienen que pasar por la Justicia”, dijo el dirigente elegido por Macri, cuyas declaraciones seguramente causarán inquietud en los organismos de derechos humanos. “No hay crímenes buenos y crímenes malos. Los crímenes son crímenes. En Argentina no hay hijos y entenados”, sugirió. “El debate histórico de la Argentina no se resuelve interpretando parcialmente estas cuestiones”, consideró.

Young dictó cátedra junto a Pando, quien se hizo conocida por su defensa de los represores presos. Macri lo confirmó en el cargo luego de que Página/12 revelara su relación con la activista procastrense y que figuraba en la web del Banco Central como “deudor incobrable”. Además de su colaboración con la causa de Pando, el virtual funcionario macrista tuvo su participación en la tribuna de doctrina de un matutino porteño, a través de sus cartas de lector (ver recuadro). En uno de los convites que compartió con Pando, Young sostuvo que uno de los “terroristas llegó al cargo máximo”. El funcionario luego aclaró que sus deudas “o fueron pagadas o renegociadas” y que no apoyó ningún golpe de Estado, aunque sí piensa –al igual que Pando– que la guerrilla debe ser juzgada en pie de igualdad con el terrorismo de Estado.

Rebot fue elegido luego de una larga lista de rechazos para ocupar el área de los derechos humanos en un gobierno de Macri. La encargada de la búsqueda fue la vicejefa Gabriela Michetti, de quien dependerá la subsecretaría. Al final, dio con Rebot, un legislador que había tenido ya su paso por el macrismo, pero que había dado el salto al kirchnerismo. Allí respondía al diputado Jorge Argüello. A Rebot le tocó integrar la Sala Juzgadora que destituyó al jefe de Gobierno Aníbal Ibarra y sumó el último voto necesario. Luego acompañó al jefe de Gobierno que sucedió a Ibarra, Jorge Telerman, en la lista de legisladores, pero no consiguió renovar su banca. Cuando aceptó integrar la gestión de Macri dejó el telermanismo, lo que implicó su cuarto pase consecutivo en estos últimos años.

En diálogo con Radio América, Rebot dejó más de una frase que despertará polémica entre los organismos de derechos humanos. Le preguntaron por un dictamen –difundido el domingo pasado en la tapa de este diario– del procurador Esteban Righi, que desautorizó el planteo del fiscal de Rosario Claudio Palacín sobre que las organizaciones armadas habían cometido crímenes de lesa humanidad. “No lo conozco”, respondió quien conducirá la Subsecretaría de Derechos Humanos. “Los crímenes de lesa humanidad no son de un sector, son crímenes que atentan contra un grupo genérico de determinadas características y que están determinados en el Derecho Internacional”, estimó.

Página/12 intentó consultar a Rebot, quien decidió no dar mayores precisiones sobre sus frases. En el reportaje radial sostuvo además que “los crímenes necesitan juzgamiento. La sociedad argentina ha tenido mucho dolor en estos años”. “Sería muy nocivo que desde la política estemos marcándole el camino de lo que tienen que decidir los jueces”, consideró.

Rebot también señaló que no habrá recortes de personal en su área y que ampliará “la política actual de derechos humanos a cuestiones que están un poco relegadas”, como los derechos económicos y sociales. En su entorno, indicaron que está discutiendo los fondos para los sitios de la memoria, incluyendo los 20 millones de pesos destinados a la ESMA, que no fueron incluidos en el Presupuesto macrista para el 2008.