El fiscal federal Luis Comparatore pedirá hoy en un dictamen el “secuestro inmediato” de todos los autos que fueron importados de manera irregular a través del régimen de franquicias diplomáticas, según denunció la Cancillería a comienzos de esta semana. En la fiscalía –informaron allegados– consideran que es una medida de urgencia preventiva y necesaria, que también podría llevar a determinar quiénes son los actuales dueños de los vehículos. Según los datos relevados por la cartera de Relaciones Exteriores, 24 camionetas Hummer fueron ingresadas en el país por este sistema, 17 autos deportivos (entre ellos Porsche y Lamborghini), además de marcas como BMW y Audi. Comparatore, además, dispondrá el secuestro de toda la documentación referida a los trámites de gestión y autorización de estas franquicias. Entretanto, intenta determinar si entre los posibles involucrados hay funcionarios con cargos diplomáticos en Argentina en la actualidad. En esos casos dictaminará que corresponde que la investigación sea llevada a cabo por la Corte Suprema. Todo esto deberá ser –o no– aprobado por la jueza María Servini de Cubría, que en estos días subroga a Norberto Oyarbide. Se vislumbra también un posible conflicto de competencia con el fuero penal económico. Por ejemplo: algunas de las medidas y documentos que pedirá Comparatore ya fueron requeridos por el juez Marcelo Aguinsky. En el fondo lo que investigan es lo mismo.