ESPECTáCULOS › ANTONIO BIRABENT PRESENTA ESTA NOCHE SU DISCO “CARDINAL”
“Es buen momento para argentinear”
El músico actuará en ND Ateneo, donde aportará su grano de arena para “esquivar la mediocridad”. Birabent sostiene que, en estos tiempos, “resistir es hacer bien lo que uno sabe”.
Por Javier Aguirre
Antonio Birabent está frente a una de sus grandes apuestas de la temporada, la presentación oficial de su séptimo disco, Cardinal, un CD de fino y luminoso sonido pop editado tres meses atrás. Un trabajo, además, que ratifica su delicadeza como compositor. El concierto será hoy a las 21.30, en el Teatro ND Ateneo (Paraguay 918), e incluirá elementos visuales como la proyección de su videografía completa, el estreno de su nuevo clip –de la canción “Me fui con ella”–, y la presentación de algunas fotografías que forman parte de un libro que planea editar. El desafío de llevar Cardinal al teatro absorbe tiempo y genera preocupaciones (“a veces me pregunto... ¿quién me manda a meterme en tanto quilombo?”), y define la producción: “Es trabajo a pulmón, familiar, con músicos que son amigos, y con mi madre managereando”. Roberto Pettinato y Emanuel Horvilleur serán los músicos invitados, junto a su banda, compuesta por el tecladista Lolo Micucci, el baterista Martín Millán, el bajista Pablo Silva y los guitarristas Leha, Rodrigo Aberastegui y Diego Rolón. Y en el horizonte, después del concierto en el Ateneo, Birabent prepara dos shows en Mendoza (pasado mañana y el 19 de octubre), y dos en Córdoba (el 10 en la ciudad, y el 12 en La Cumbre).
–¿Cómo se lleva con el hecho de tocar en vivo tan seguido?
–Hay mucho de enfrentar obstáculos, de pelearla, de argentinearla. Es un buen momento para argentinear. Es un buen momento para volver a las bases, después de años de haber vivido una fantasía (acciona su contestador telefónico, y se escucha su voz diciendo “cada vez me gusta más la Argentina”). No es ironía, eh. A mí cada vez me gusta más la Argentina. Pero en serio. Es cierto que la gente que maneja el país hace las cosas mal, pero a algunos nos toca hacerlas bien. Hay mucha gente que hace las cosas bien. Y los que estamos acá tenemos que bancarla, aunque yo no use esa palabra. Flotar en el aire, para tomar fuerza, y esquivar la mediocridad. Luchar.
–¿Cómo será el concierto?
–El teatro hace atractiva la posibilidad de reproducir los climas del disco, sus texturas. Vamos a proyectar ciertas imágenes en algunas canciones, y presentaremos el nuevo video, pero con una edición distinta a la que se va a ver por televisión, o sea un remix del video. Va a ser un show con mucho trabajo. Ahora... ¿por qué, cuando el país se hunde, yo me pongo a producir un espectáculo en un teatro, donde sé que voy a perder plata? Es porque me da mucho placer. Estamos aquí para seguir, para resistir, que es hacer bien lo que uno sabe hacer. Y yo sé hacer música.
–Además de los temas de “Cardinal”, ¿el repertorio va a incluir alguna mirada retrospectiva?
–Los últimos días, por los ensayos, estuve llegando a casa tarde, y muy cansado. Y recordé cuántas veces en mi vida la música me había hecho llegar a casa exhausto y de madrugada, con un bolso, casetes, cables, pedales, instrumentos, papeles con ideas. Me pareció una buena colección de sentimientos y experiencias relacionados con la música, o con músicos con los que ya llevo mucho tiempo trabajando, como Lolo Micucci. Ya tengo un recorrido, y últimamente estuve bastante atento a las fechas. Esta semana, por ejemplo, se cumplieron quince años de mi vuelta a la Argentina...
–¿Felicidades?
–Sí, sí, felicidades. Y en el show va a estar la mirada retrospectiva sobre esas noches y esas anécdotas. Me pasaron muchas cosas desde que empecé a hacer música. He sido artista de culto, invendible; precursor de grabar en tu casa y fabricar el disco vos mismo, niño mimado de una discográfica... Yo hago música, y estoy contento con lo que hago. No sé cuántos músicos en la Argentina grabaron siete discos en nueve años, o tuvieron la capacidad de insistir, tanto cuando las cosas vinieron afavor, como cuando vinieron en contra. Yo me dedico a ese trabajo. Y humildemente, porque ni vendo millones de discos, ni me vienen a ver millones de personas. Todo me cuesta mucho, pero me da mucho placer. El foco no está en la plata; si fuera por la plata haría cualquiera de las telenovelas que me ofrecen.
–¿Qué opiniones escuchó sobre “Cardinal”?
–La música me dio satisfacciones gloriosas, como que Mercedes Sosa me dijera que está ensayando “Río en espiral” para cantarlo. Y también me pasó algo muy especial con Pettinato. Yo no lo conozco, y un día me llamó a mi casa y halagó muchísimo mi disco, con palabras muy elogiosas. Descubrí en él a un melómano impresionante. Me dijo: “Descubrí al Birabent inglés: Elliott Smith. Te copió todo. Es igual a vos”. Me encantó el halago. Lo invité a tocar en el cover de Lou Reed “I’m waiting for the man” y descubrí que Lou Reed, más Pettinato en saxo, es Sumo. Se me puso la piel de gallina.